Todos nacemos con una caja de fósforos adentro,
pero no podemos encenderlos solos...
Cada persona tiene que descubrir qué disparará esas explosiones para poder vivir,
puesto que la combustión que ocurre cuando uno de los fósforos se enciende,
es lo que nutre al alma.
Laura Esquivel
Todos los espectadores los observan con admiración y hasta incredulidad por la hazaña. Ese día ocupan puestos especiales; sus medallas y rostros tienen un brillo sin igual. Desde el desfile, se convierten en luminarias que, literalmente, llenan el espacio de luz. No es para menos, pues no solo los inunda el orgullo de culminar una de las etapas más importantes de la vida, sino que lo conquistan con el más alto prestigio.
Son los historiadores, biólogos, empresarios, ingenieros, y meteorólogos que, a partir de hoy, aportarán sus inigualables talentos desde distintos escenarios. Son los nueve estudiantes del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) que recibieron el máximo galardón académico que se les otorgó por haber completado su grado con un índice de 4.00 puntos.
La gesta pertenece a cinco alumnos del Colegio de Artes y Ciencias; tres de Ingeniería y una estudiante de Administración de Empresas, quienes recibieron hoy el premio Luis Stefani Raffucci durante la nonagésima octava colación de grados del RUM. Este reconocimiento se le concede a los alumnos que además de mantener un promedio perfecto, nunca recibieron una calificación de F y solo tuvieron una baja en el transcurso de su vida académica.
Los colegiales galardonados este año son:
Verónica María Rodríguez Rivera
Con un bagaje completo. Así aseguró esta mayagüezana sentirse tras culminar su Bachillerato en Historia del Departamento de Ciencias Sociales. Y es que, según explicó, en su paso por el Colegio se enriqueció con todo lo aprendido en sus cursos y con las distintas visiones que le aportaron sus profesores, compañeros y mentores. Esa preparación la motivó para comenzar sus estudios graduados en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico con miras a dedicarse eventualmente a una carrera como docente.
"Mi experiencia en el RUM me ayudó a desarrollar mi potencial. Las clases y los profesores, por lo menos en mi caso, me estimularon para dar el 100 por ciento de mí", expresó la joven de 21 años, quien se siente "emocionada y honrada" de recibir esta distinción.
Javier Esteban Sánchez Martínez
A sus 23 años, este recién graduado del Departamento de Ingeniería Mecánica tiene ya su futuro muy organizado. Su determinación es producto de la calidad de enseñanza que, a su juicio, recibió en el Recinto y que no se centró solo en una excelente educación, sino en su formación como ser humano.
"El entrenamiento académico va más allá de tomar exámenes y sacar buenas notas; se desarrolla la responsabilidad social de uno como profesional", precisó el joven oriundo de Mayagüez, cuyo próximo paso será estudiar Medicina en el Columbia College of Physicians and Surgeons en Nueva York, en agosto.
"Quiero integrar la Ingeniería con la Medicina. Haber estudiado Ingeniería no fue un accidente, fue planificado. Creo que hay mucho campo para el desarrollo en esta combinación, ya sea en tecnologías de asistencia que sean económicamente accesibles a nivel mundial como en el mejoramiento de prácticas existentes y el desarrollo de tratamientos y procedimientos nuevos. En un futuro, me veo como médico, investigador, educador y, por supuesto, ingeniero", manifestó.
Javier describió la oportunidad de recibir el premio como "un gran honor" y agradeció a sus profesores y mentores Iván Baigés, Christopher Papadopoulos, Jorge Ferrer, Bárbara Calcagno, Pedro Quintero, David Dooner y Paul Sundaram. Asimismo, aseguró que su triunfo no hubiese sido posible sin el apoyo de sus compañeros, su familia y Dios.
Andrea Coral Rodríguez Padilla
Determinada, madura, decidida, independiente y presta para ingresar al mundo profesional, son algunos de los calificativos con los que se identifica esta joven oriunda de San Juan, la única de las premiadas que representa al Colegio de Administración de Empresas, cuyo Bachillerato incluye dos concentraciones en Contabilidad y Finanzas.
"Además de los conocimientos adquiridos, mi paso por la Universidad me ayudó a alcanzar muchas destrezas que son necesarias para ser exitosa en el ambiente laboral y social. Estas experiencias me permitieron desarrollar liderazgo, habilidad de trabajo en equipo y de relaciones interpersonales", destacó la empresaria, quien a sus 21 años se estrenará el próximo mes como profesional de Goldman Sachs, donde será responsable de tareas en el área de comptrollers, entre estas preparar y hacer ajustes a los estados financieros de algunas de las entidades legales o subsidiarias de este banco de inversiones.
Andrea, a quien le gustaría obtener la licencia como Contador Público Autorizado y, eventualmente, continuar estudios graduados, aseguró sentirse orgullosa con este premio que valida que "el esfuerzo y el sacrificio durante los pasados años ha rendido frutos".
Laura Marie Del Valle Pérez
Una carrera universitaria rica en formación académica y social, es la mejor manera en que esta mayagüezana adoptada en Las Marías, puede relatar su paso por el Recinto. Y es que Laura no solo luchó por dejar huellas académicas de excelencia en su trayectoria subgraduada, sino que la complementó integrando uno de los íconos de sangre verde y blanca: la Banda de Marcha Colegial.
Para esta recién egresada de Microbiología Industrial, en el Departamento de Biología, esa vivencia marcó una diferencia, pues le dio una perspectiva distinta. Eso unido a la investigación que realizó por un periodo de tres años, a su aportación como miembro del Golden Key International Honour Society y a su participación en diversos talleres la ayudó a sacar el máximo provecho a su experiencia.
"A través de cada experiencia, ya sea positiva o negativa, aprendí destrezas y conocimientos que, sin lugar a duda, son los cimientos para que cada individuo crezca tanto a nivel profesional como personal. Son las experiencias las que dirigieron mi rumbo, mis decisiones, mi presente y mi futuro", dijo la joven de 23 años, quien proseguirá su Maestría en Biología en el RUM.
En cuanto a ser una de las recipientes del Stefani Rafucci, aseguró sentirse muy entusiasmada con un premio que no esperaba. "Es en este punto donde se puede observar el fruto del esfuerzo, las noches de desvelo y largas horas de estudio", puntualizó.
Julián G. Lugo Picó
Un mayor compromiso social fue el mejor legado que recibió este joven mayagüezano, cuya experiencia colegial lo transformó en una persona "madura, consciente y enfocada". Agradecido por el pan de la enseñanza que recibió de la mano de excelentes profesores, Julián considera que su vocación debe ir más lejos del Bachillerato en Biología que hoy completa.
"El paso por el Colegio me ha hecho crecer, no solamente en las áreas de mi concentración, sino también ha despertado preocupación e interés en los problemas que cada día nos rodean. Creo que como todos, tengo la responsabilidad de conocer nuestra cultura y sociedad, para así valorarla y conservarla con orgullo y entusiasmo, ya que lo que no se conoce, no se valora", precisó.
Este graduado de 21 años, quien se propone estudiar Medicina en el Recinto de Ciencias Médicas de la UPR el próximo mes de agosto, relató que, en su caso, el premio que hoy recibe cobra un mayor significado, pues desde niño observaba al Colegio con admiración, cariño y respeto.
"Solamente tener la oportunidad de estudiar aquí es motivo de gran orgullo. Es un honor recibir esta recompensa por la responsabilidad que siento como estudiante del Colegio. Nunca pensé que estaría en esta posición al terminar mi bachillerato; este premio demuestra que cada cual es capaz de lograr lo que quiera, con esmero y dedicación", acotó Julián al tiempo que agradeció su familia por sus sacrificios para lograr la hazaña.
Marinés Montes González
Si alguien sacó el máximo provecho a su trayectoria universitaria fue esta guaynabeña de 24 años, quien no perdió ni una sola oportunidad para parear sus cursos con experiencias que la enriquecieran. La recién egresada de Ingeniería Industrial formó parte de dos internados, un Coop y un semestre de estudios en la Universidad de Carlos III de Madrid, España. Asimismo, desarrolló liderazgo y aprendió a trabajar en equipo a través de las asociaciones estudiantiles Alpha Pi Mu y Campus Verde.
"A través de estas experiencias, pude conocer y trabajar con muchas personas con diferentes puntos de vista. Esto me ayudó a ver distintas perspectivas y prepararme para entender las distintas oportunidades que tuve al terminar mis estudios", pronunció Marinés, quien precisamente ya se integró al mundo laboral con la compañía Procter & Gamble en Cincinnati, Ohio, donde se desempeña como Initiatives Operations Leader.
La ingeniera, cuyo futuro incluye la posibilidad de realizar estudios graduados y de continuar desarrollándose profesionalmente a nivel internacional, agradeció a su familia, amigos y profesores por el apoyo que le brindaron para conseguir esta distinción.
Rosimar Ríos Berríos
No solo culminó una de las secuencias curriculares más novedosas y atractivas del Colegio, la de Meteorología, acompañada de un Bachillerato en Física Teórica del Departamento de Física, sino que lo hizo con promedio perfecto y con un caudal de experiencias que la ayudaron a conseguir el equilibrio perfecto a nivel académico, profesional y social.
Esta oriunda de Barranquitas relató que la ventaja principal de su carrera universitaria es la multiplicidad de disciplinas en las que se preparó, como la física, la meteorología, las matemáticas y la oceanografía, lo que le abrió las puertas a diversos internados de verano y oportunidades en el campo de la investigación.
"Las experiencias que tuve dentro y fuera del salón me clases me ayudaron a crecer tanto, que al mirar al pasado me doy cuenta del gran impacto que ha tenido la educación universitaria en mi carrera. Ahora siento que soy un ser humano más completo, capaz de aceptar y lograr grandes retos", narró la alumna, quien también formó parte del capítulo estudiantil de la Sociedad Meteorológica de Puerto Rico (SMPR).
Ahora, a sus 23 años y con una maleta llena de sueños, Rosimar emprende una nueva ruta cuando comience en agosto próximo estudios graduados en la State University of New York, en Albany. Su meta es realizar investigación en el campo de la meteorología tropical, con la misión de buscar alternativas para mejorar los modelos numéricos que se utilizan como guías para predecir la trayectoria e intensidad de los huracanes, para lo cual ya cuenta con dos prestigiosas becas.
En cuanto al galardón que hoy recibió, admitió sentirse feliz y honrada por considerarlo un premio al esfuerzo, trabajo arduo y sacrificios. "Mi mayor deseo ahora es que otros estudiantes vean mi logro como el vivo ejemplo de que en la vida no es tan importante de dónde vienes o qué herramientas posees, como lo es que luches incansablemente por alcanzar lo que te has trazado para lograr tu felicidad y la de tus seres queridos".
Caroline M. Mejías De Jesús
Dividir su tiempo entre la responsabilidad de sus estudios y su pasión por dejar una huella a nivel social fue la ruta que decidió tomar esta graduada de Microbiología Industrial del Departamento de Biología. Al pasar revista sobre los resultados, la joven se reitera en que ese camino le permitió crecer como ser humano y como profesional.
La manatieña de 22 años recuerda con nostalgia y agradecimiento las experiencias de investigación junto a la profesora Sandra Maldonado, así como el Simposio Subgraduado de Biología y los dos internados a los que asistió en la Universidad de Minnesota y en New York University. De igual forma, atesora el servicio que rindió a sus pares y a la comunidad como tutora en el English Writing Center del RUM y con la organización SIFE.
"Después de mi paso por el Colegio, puedo decir que fui expuesta a todas estas áreas que ayudaron en mi formación como profesional y que me gradúo con los conocimientos necesarios para competir en los estudios graduados que comenzaré en agosto", expresó la microbióloga, quien se integra al Recinto de Ciencias Médicas de la UPR con miras a realizar un doctorado en Farmacia.
"Para mí es un logro increíble recibir el premio Luis Stefani Raffucci. Es una meta que me proponía cada semestre y que, al finalizar mi bachillerato, pude cumplir, así que me siento muy feliz por esto".
Cristina Enid Ramos González
La diversidad de ideas, pensamientos, sabidurías y convicciones fue el motor que movió a esta mocana de 22 años durante su paso por el Colegio, de donde completa su grado en Ingeniería Química.
"Aprendí muchas cosas sobre la profesión y sobre mis intereses universitarios. Conocí muchos profesores y compañeros que me enseñaron mucho y cómo ser una buena profesional para poder ser útil a la sociedad", señaló Cristina, al tiempo que admitió sentirse más madura y definida en cuanto a sus metas.
La ingeniera química comenzará estudios en Medicina en el Recinto de Ciencias Médicas de la UPR, donde espera obtener el bagaje para "trabajar y brindar mis conocimientos y experiencias para el beneficio de mi País".
"Me siento muy feliz y orgullosa de recibir este premio, ya que fue una meta que me propuse desde que entre al Colegio y gracias a mis padres, compañeros y profesores, hoy puedo decir que lo logré".