Las historias de cómo reacciona cada puertorriqueño ante un temblor son innumerables; van desde relatos jocosos de quienes corren, hasta los nervios que paralizan y los gritos por el miedo ante lo desconocido. Precisamente, con la intención de educar a la población sobre los pasos básicos que debe seguir para proteger vidas en caso de un terremoto, se llevó a cabo la semana pasada El gran Shakeout de Puerto Rico.
La Red Sísmica de Puerto Rico (RSPR), adscrita al Departamento de Geología del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), coordinó este simulacro de terremoto en conjunto con la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) y su homóloga en Puerto Rico, la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, las que unieron fuerzas para lograr convocar a todo el País el pasado 18 de octubre, justo a las 10:18 a.m.
"El objetivo es concientizar a nuestra ciudadanía sobre qué hacer cuando la tierra empieza a temblar, cuál es la mejor práctica recomendada por científicos para evitar daños a nuestra integridad. Un temblor puede ocurrir en cualquier momento, por experiencia sabemos que no todos responden adecuadamente, así que el propósito del Shakeout es explicar a la gente que la mejor forma para protegernos es conservar la calma y activar los tres pasos: agacharnos, cubrirnos y sujetarnos", precisó el doctor Víctor Huérfano, director interino de la RSPR.
El funcionario hizo sus declaraciones durante el ejercicio que tuvo lugar en las instalaciones del Parque Isidoro García de Mayagüez y al que se integraron todas las agencias coordinadoras, incluida la de manejo de emergencias municipal, así como niños y jóvenes estudiantes de alrededor de siete escuelas de la región. La compañía privada Caos Interactivo, De Frente al Desastre proveyó un simulador de terremoto que ilustró a los visitantes cómo se sentiría un fenómeno de esa naturaleza. Allí, en estricto orden y silencio, los participantes siguieron las instrucciones y pusieron a prueba su conocimiento de los tres pasos.
¿Y por qué agacharse, cubrirse y sujetarse? De acuerdo con el director interino de la RSPR, bajo la premisa de que la mayoría de los edificios en Puerto Rico han sido construidos con los códigos y especificaciones adecuados, el mayor peligro ante un movimiento telúrico es el que causan los objetos cercanos al entorno doméstico, escolar, o laboral como, por ejemplo, cuadros, armarios, libros, televisores y lámparas, entre otros.
"Por eso la recomendación es que nos agachemos, nos metemos debajo de un mueble que sea resistente y nos sujetemos, pues las cosas van a caer encima de este y no sobre nuestra cabeza o espalda que son nuestros puntos vitales. Luego, esperamos un tiempo razonable de un minuto que es lo que transcurre para que se considere dañino. No tenemos que vivirlo para saber qué podemos hacer para protegernos", advirtió Huérfano, al tiempo que recordó que también es necesario revisar o tener un plan de emergencia.
De hecho, este esfuerzo se distinguió porque todas las personas interesadas en unirse pudieron registrarse con meses de anticipación a través de la página de internet http://www.shakeout.org/puertorico/ Esta fue creada para ese propósito y para brindar toda la información necesaria, estadísticas y hasta un certificado de participación. Al cierre de esta edición, se constataba un total de 750 mil puertorriqueños activos en el ejercicio.
En Mayagüez se registraron 34,562 ciudadanos; mientras las instituciones universitarias de la Sultana del Oeste sumaron 16,415, cifra que incluyó al Recinto Universitario de Mayagüez, la Universidad Católica, Recinto de Mayagüez y la Universidad Adventista de las Antillas, según los datos publicados por la página oficial.
Aparte de su importante rol como sede de la Red Sísmica de Puerto Rico, el RUM convocó a toda la comunidad a unirse al Shakeout a través de mensajes enviados a la comunidad por el rector Jorge Rivera Santos, y también con la activación de su Comité Operacional de Emergencia (COE). Asimismo, según se ha dado a conocer a través de las redes sociales, muchos profesores y estudiantes reunidos en salones de clase, empleados en sus oficinas y diversas dependencias universitarias interrumpieron sus labores para realizar el breve simulacro.
"Un temblor no es un castigo, es un fenómeno natural que ha de ocurrir en cualquier momento. Si va a temblar, fantástico; que la naturaleza se exprese y libere su energía, pero nosotros ¿qué vamos a hacer? No podemos evitarlo, pero sí los daños, así que todos debemos poner de nuestra parte. Tenemos que seguir mejorando los equipos, los métodos, las localizaciones, pero aunque los sistemas de alerta de emergencias y las redes sísmicas ultramodernas ayuden, la prioridad es proteger nuestras vidas, es nuestra responsabilidad orientarlos para que sea la misma población la que salga adelante", enfatizó Huérfano.
El próximo evento de esta categoría será el Ejercicio de Tsunami LANTEX 13 en el mes de marzo y, el segundo Shakeout que se espera pueda realizarse en octubre de 2013 con una mayor y contudente participación boricua.