Un grito de celebración español, enlazado a la historia borinqueña en el periodo de vida del prócer Ramón Power y Giralt, dio nombre a la obra teatral Viva la Pepa, escrita por el doctor Jerry Torres Santiago, catedrático asociado del Departamento de Humanidades (HUMA) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
De acuerdo con su autor, la inspiración de esta expresión artística, nació como parte del festejo de los 200 años de la Constitución de Cádiz, creada en el 1812, con la cual el héroe puertorriqueño luchó por obtener derechos económicos, políticos y sociales para la Isla. Su fruto fue la Ley Power, en ese mismo año, que concedió las ventajas anheladas para su patria.
Precisamente, este momento cumbre en el antaño de Puerto Rico trascendió las barreras del tiempo y ha dejado huellas imborrables en el Borinquen de la actualidad, que recibió los restos de su reformista en marzo del 2013 después de permanecer en España por dos centurias.
“Todo trabajo histórico tiene el propósito de llevarnos al pasado, para interrogarnos sobre nuestro presente y proyectarnos hacia el futuro. El fin que teníamos era que los alumnos se pudieran identificar con la experiencia de una persona que asume su responsabilidad y tiene dificultades, pero que eventualmente, triunfa”, indicó el escritor a Foro Colegial.
Asimismo, la obra incluyó detalles íntimos del luchador sanjuanero, ya que según Torres, era trascendental exponer el lado sentimental del ilustre, desconocido por muchos, pero importante para comprender que, a pesar de los logros obtenidos, el boricua en tierra europea tenía las mismas adversidades que la audiencia.
“No solamente era presentar al hombre que es un héroe político, sino que tratamos de integrar la parte humana de este personaje mediante la creatividad artística. Es por tal razón, que pensamos en los conflictos que podía tener y sobre todo, en un Ramón Power que se enamoró, que tenía dudas y preocupaciones dentro del contexto de lo hecho en Cádiz. Inmediatamente, este fue el lado que nos impactó a todos”, manifestó el educador de Arquitectura.
Por otra parte, el triunfo de la creación de Torres fue posible gracias a la colaboración de la organización colegial, Asociación de Estudiantes de Drama en la Educación (AEDE), y su mentora, la doctora Noemí Maldonado Cardenales, catedrática auxiliar de HUMA. El colectivo, que surgió como parte de una clase de actuación en el 2010, ofreció su talento actoral y dirección para el desarrollo del exitoso proyecto.
“Nosotros nos hemos unido y desde el 2010 aceptamos proyectos como este. Hemos presentado teatro clásico y puertorriqueño. En el caso de Viva la Pepa, el colega es boricua y esto es de mucho orgullo. Cuando recibimos su propuesta, la organización acababa de montar Macbeth, así que tenían experiencia", añadió la profesora.
Y fue esta unión de educadores, la forjadora de un ambiente de compañerismo y dedicación, lo que funcionó como ingrediente principal para el triunfo que tuvieron todas las puestas en escena en el Colegio.
“Lo que existió fue comunión del arte. Una unión entre las ramas de la historia y arquitectura, con mi primer amor, el teatro. Jerry vio en mí el potencial de darle vida a un sueño que probablemente él tenía por mucho tiempo. Esto no es para tenerlo en un texto escrito y que lo lean años después en la escuela. Esto es para apreciarse en un escenario. Si él vio en nosotros el poder realizar esa meta, me siento satisfecha, honrada y orgullosa”, compartió Maldonado Cardenales.
Para ambos profesores, fue una experiencia inolvidable ver el producto de su esfuerzo en escena y cómo sus estudiantes daban vida a personajes, que aunque tenían diferente expresión lingüística y realidad social, mantuvieron a los espectadores constantemente emocionados.
“Es un momento que lo llamo la magia hecha realidad. Sentí mucha emoción, no solamente al ver mi obra, sino también que esto sirve como mecanismo para que estos jóvenes demuestren su talento. Los actores entregaron su alma y eso era único. Valió la pena tanto esfuerzo y sacrificio. Todavía me conmueve”, manifestó Torres.
De igual forma, los colegiales que participaron en Viva la Pepa manifestaron sus sentimientos al ser parte del proyecto. Entre ellos, se encontraba Adaluz Santos, quien interpretó a Josefina Dart, pareja de Ramón Power y Giralt.
“Mi personaje me gustó mucho. Fue muy interesante participar porque estaba el escritor. Eso nos ayuda mucho pues él nos dio una visión clara de lo que quería”, expresó la estudiante de Horticultura.
Por su parte, el alumno Christopher Avilés, del Departamento de Ingeniería en Computadoras, representó el personaje antagónico.
“A mí me tocó Arzuaga, una persona fuerte y manipuladora que siempre buscaba hundir a Ramón. Es interesante porque no era una crueldad directa, ya que se hacía pasar por confidente del prócer. Representar eso fue difícil porque tenía que tener dos personalidades que hablaban de diferentes formas”.
Según el autor de Viva la Pepa, la disciplina fue la cualidad que más sobresalió entre estos actores. Al ser una velada que se gestó por la colectividad entre departamentos, el compromiso de todos los artistas, era necesario para el éxito de los ensayos y las presentaciones.
“Para hacer teatro hay que ser disciplinado. Las personas que entran en este mundo aprenden mucho sobre esta aptitud. Yo estoy seguro que en el futuro, estos compañeros serán excelentes profesionales, tal como lo fueron en el escenario”, aseguró Torres Santiago.
Agregó que, al terminar la función, los aplausos del público fueron contundentes, emotivos y demostraron que la magia del teatro seguirá triunfante en el RUM.
Precisamente AEDE, junto a Corium Canticus, presentará esta semana El gran circo eucraniano de la escritora puertorriqueña, Myrna Casas. Las funciones serán el martes, 23 de abril a las 10:30 a.m., el miércoles 24 de abril a las 7:30 p.m. y el jueves, 25 de abril a las 10:30 a.m. y 7:30 p.m.
Video reportajes disponibles en:
Foro Colegial TV-Obra "Viva La Pepa"
