En un ambiente de fiesta y celebración, ataviados con sus uniformes verde y blanco, la Banda de Marcha del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), recorrió las principales avenidas del campus enardeciendo el espíritu colegial con sus contagiosas melodías que anunciaban la conmemoración de su nonagésimo noveno aniversario.
"De manera continua, han estado representando ese orgullo dondequiera que van, y nos sentimos muy complacidos del esfuerzo extraordinario que hacen porque ahí está el corazón del Colegio. Hay otros grupos musicales en Puerto Rico, pero ninguno le llega a los tobillos al nuestro", expresó el doctor Jorge Rivera Santos, rector del RUM.
De igual forma, opinó Wilma Santiago Gabrielini, decana de Estudiantes, quien destacó la importancia que tiene la agrupación en el recinto mayagüezano.
"Es un eje vital en todas las celebraciones, muy emblemático. Ha sido el fruto de muchos años de excelencia académica y, sobre todo, de la integración de un plan socio-cultural a nuestra universidad con el talento de los alumnos", subrayó.
Al festejo se unió un nutrido grupo, que incluyó a alumnos, profesores y empleados, quienes acompañaron a la principal agrupación artística del Recinto hasta la Biblioteca General donde culminó su recorrido con un deleite de interpretaciones musicales.
Allí, junto al profesor Edgar Vélez, director del Departamento de Banda y Orquesta, la administración universitaria resaltó las ejecutorias del grupo. "Han sido años de música ininterrumpida, de calidad y de representación de los colores verde y blanco de nuestros estudiantes, que es la razón de ser de este Colegio".
Por su parte, el profesor Efrén Gregory, director de la Banda por los pasados 26 años, describió a su equipo de concertistas como uno de "excelencia".
"La labor que hacemos y el sacrificio de los ensayos, muchas veces bajo el sol, es el compromiso que tenemos para que cada año sea un ícono y un orgullo para el Recinto, al igual que para nosotros. Mi filosofía es que esto es de ellos y para ellos. Nosotros somos guías y los motivamos para que den el máximo como siempre lo hacen", sostuvo.
La destacada ejecución que distingue a este conjunto instrumental, que actualmente cuenta con 110 músicos y 16 abanderadas, ha hecho que goce de gran admiración dentro y fuera del RUM.
"Yo me siento sumamente orgulloso de pertenecer a una banda que ya va a cumplir 100 años. Y más allá de ser parte de esta prestigiosa institución, lo que me da satisfacción, es ser parte de este grupo de jóvenes talentosos que tiene el Colegio. Aquí vemos desde ingenieros, matemáticos, biólogos, químicos... todos haciendo una pausa académica y poniendo su granito de arena", aseveró Wilfredo Cordero, quien se desempeña como Drum Major.
Coincidió con él, la flautista Olga Ortiz, otra alumna orgullosa de ser parte de la celebración, en la que -a su juicio- se destaca la unión que reina entre sus compañeros.
"Me siento bendecida de ser parte de este evento tan grande. Somos una familia, por eso nuestro lema es Una banda, un sonido. Somos una persona cuando estamos en el field representando al RUM. El ambiente se siente como un hogar; esto es una casa. Aquí estamos entre amigos, entre hermanos", señaló la estudiante de Biotecnología Industrial.
Banda oficial de las Justas LAI
Durante su trayectoria, la casi centenaria Banda Colegial ha ofrecido su talento en distintos festivales, carnavales, paradas, conciertos, retretas y en las tan esperadas Justas de la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI).
"Llevamos más de 20 años participando sin interrupción. Ahora mismo somos la banda oficial de las Justas, más estamos por cumplir 100 años, así que tenemos una responsabilidad increíble en nuestras espaldas. Este semestre es bien estresante y, a la misma vez, tan bonito porque uno aprende a distribuir su tiempo entre lo académico y lo profesional, porque esto es un trabajo", insistió Cordero.
El estudiante graduado de Ingeniería Civil añadió que en sus intervenciones en las diferentes actividades el compromiso se duplica, ya que también deben hacer lucir al Colegio como una universidad de excelencia.
Mientras, Ortiz catalogó la experiencia como una inolvidable. "Me he dado cuenta de que cada año es la misma emoción. Nos hemos preparado tanto para ese momento que cuando llegamos allí es un sentimiento extraordinario. Aunque uno está nervioso, lo que quiere es irse a marchar y hacer una buena representación".
Legado que trasciende
La Banda de Marcha, fundada en 1914 como parte del Programa de Ciencias Militares (R.O.T.C), comenzó a caracterizarse desde entonces por la majestuosa interpretación del tan aclamado himno colegial, sus famosas marchas y la diversidad de conciertos en la región oeste.
En sus inicios, el grupo musical estuvo dirigido por Don Juan Madera, luego pasó a manos de Don Celso Torres en el 1945, y no es hasta el 1980 cuando el profesor Ángel E. Morales, quien se había destacado como director de la Banda COPANI durante los Juegos Panamericanos en el 1979, toma la batuta, convirtiéndola en una Banda de Fantasía, capaz de ejecutar maniobras sobre el terreno mientras realizaban sus interpretaciones. Ya en 1981, se integran las Abanderadas al conjunto para darle más sabor al espectáculo musical con sus coloridas y llamativas coreografías.
La agrupación, la más antigua en su genéro en Puerto Rico, representó a la Isla, a Mayagüez y al otrora Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas (CAAM), en junio de 2009 en la Parada Puertorriqueña en Nueva York, donde realizaron una destacada labor.
En julio de 2010 participó en la Inauguración de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en la Sultana de la Oeste, así como en la Serie del Caribe, ante la representación de 32 países de Latinoamérica.
Asimismo, el pasado año se destacaron exitosamente durante la Exhibición de Bandas que celebra la Oficina de Asuntos de la Juventud, donde Wilfredo Cordero, drum major, y Kevin Pacheco, drum major assistant, fueron seleccionados para participar en unos talleres de banda de marcha que se llevaron a cabo en la ciudad de Indianápolis.
Actualmente, poseen un variado repertorio de música entre los que se destacan Americano, Late in the Evening, In the Store, El Cumbanchero, un medley de plena, y, por supuesto, el himno colegial.
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99 aņos de excelencia musical
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