Se trata de 80 estudiantes del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) quienes se convirtieron en los nuevos profesionales en el área de la salud. La clase graduanda 2013 celebró, junto a la Facultad del Departamento de Enfermería del RUM, su iniciación a la profesión en una ceremonia realizada en el Teatro Yagüez el pasado jueves, 6 de junio.
Ataviados con sus uniformes y calzados blancos, el conjunto recibió los tradicionales distintivos que les identifican como profesionales de la Enfermería. A las féminas se les colocaron las cintas verde y negra en sus cofias, mientras que los varones llevan los colores en el cuello de sus camisa además de unos alfileres. Acto seguido, se les tomó el juramento que sella el compromiso que adquirieron con su vocación.
Para la profesora Zaida L. Torres, directora del Departamento, este es un grupo sumamente especial porque además de contar con los conocimientos y destrezas requeridos, se distinguen por su compasión y compromiso.
"Tan reciente como el fin de semana pasado, tuve la oportunidad de participar en una feria de salud en la República Dominicana y pude llevarme a once de los candidatos a graduación; realmente me sorprendió cómo trabajaron. Definitivamente, estoy bien segura de que representarán la profesión dignamente dondequiera que estén".
Esas cualidades que ayudarán a promover el bienestar del paciente que se encuentre bajo su cuidado, se resumen en prudencia, astucia y dinamismo. Así lo destacó la profesora Madeline Rivera, quien tuvo a cargo el mensaje de la ocasión, y quien agregó otros cinco criterios que les llevarán a ser exitosos en su carrera.
"Deben ofrecer un servicio de alta calidad, proyectar a Cristo en el corazón, impartir compasión y colaboración, y ser íntegros". En sus palabras incorporó anécdotas que han sido parte de su rol en la institución hospitalaria en la que labora con el propósito de demostrar a los colegiales que se pueden vencer las adversidades que puedan presentarse.
Sin duda, las dificultades que aparecieron en su caminar profesional no fueron un impedimento para que los alumnos culminaran la meta anhelada.
Entre ellos se encontraba jubilosa, Zareily C. Pacheco Rivera, quien destacó que más que una profesión, la Enfermería es una vocación para toda la vida.
"Ya pude alcanzar uno de mis sueños: graduarme y me siento muy feliz. Este campo es el que me gusta, la salud; ver las necesidades de otros y servir de apoyo a las personas", aseguró.
Zareily es además una de las homenajeadas con el premio Luis Stefani Raffucci en la nonagésimo novena colación de grados del RUM, y a su vez, recipiente del premio Paulina R. Dávila, por contar con el índice académico más alto entre todos los graduandos del Departamento de Enfermería. La alumna proseguirá estudios en Medicina, en la República Dominicana.
Otro de los egresados es Roldán González González, para quien combinar una jornada laboral con sus estudios no representó una dificultad para convertirse en enfermero. Desde hace siete años labora como guardia universitario y por los últimos cuatro, fue también estudiante a tiempo completo.
"En un principio parecía algo imposible, pero poniendo a Dios por delante, logré alcanzar la meta; gracias al apoyo incondicional de mi esposa y mi familia", indicó.
El evento también adquirió un significado muy especial para Alejandra Del Río, presidenta de la clase 2013. La líder recordó las horas de estudio y en su caso, de coordinación para los preparativos del evento también conocido como el capping de Enfermería.
Como es costumbre, la ceremonia incluyó los reconocimientos a los graduandos más destacados. En esta ocasión, el Premio Laura B. Guillén de Rivera le correspondió a Neychimar Soto Ramírez, por destacarse en el curso Enfermería de la comunidad y participar en las actividades departamentales.
También, miembros de la Sociedad de Honor de Enfermería, capítulo Epsilon Lambda reconocieron a los mejores alumnos de la clase 2013.
La ceremonia de iniciación a la profesión de Enfermería contó asimismo con la presencia de los decanos interinos: Marta I. Colón, de Estudiantes; Manuel Valdés Pizzini, de Artes y Ciencias; y Julio Briano, de Asuntos Académicos.