La iniciativa Amgen Biotalents revalidó su éxito en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), con la celebración de diferentes actividades en las que estudiantes de diversas disciplinas obtuvieron conocimientos en el campo de la biotecnología industrial.
“Ellos tienen una experiencia intensiva de naturaleza teórica y práctica en la que reconocen lo que es este ambiente, lo que conlleva un cuarto limpio y de ahí, empiezan el protocolo de alterar genéticamente una célula, crecerla a gran escala y purificar una proteína recombinante. Todo eso enmarcado en los conceptos de control de calidad, mecanismos de regulación, monitoreo ambiental y una vestimenta adecuada”, explicó la doctora Roxa Buxeda, mentora del proyecto.
Precisamente, estos participantes, que trabajan en grupo para el beneficio de su experiencia intelectual, obtienen ventajas académicas y profesionales que los preparan para enfrentarse a la industria luego de la culminación de sus estudios.
“Estos programas les dan a los estudiantes un portafolio más competitivo a la hora de graduarse. Su resumé va a ser mucho más atractivo porque, obviamente han sabido complementar sus estudios con actividades que le dan una nueva visión de lo que requiere este mundo, y parte de lo que se hace en el adiestramiento es que todas las actividades están enmarcadas en cómo esta temática ocurre en las compañías. Incluso, al final, los aprendices tienen una pasantía donde ellos son capaces de validar lo que aprendieron en el Recinto”, indicó la también catedrática del Departamento de Biología.
De hecho, este taller intensivo de 30 horas, que ha impactado a más de 120 alumnos de diferentes universidades, ha creado una diferencia en la experiencia laboral de sus participantes, ya que la mayoría ha obtenido éxito luego de la enseñanza.
“Yo me siento bien complacida porque una de las cosas que nosotros hicimos este año fue darle seguimiento a los estudiantes que fueron parte de la primera edición. Para nuestra satisfacción, de aquellos que se graduaron, alrededor del 55 por ciento continuó escuela graduada y el resto está trabajando, así que esto es una data sumamente valiosa”, expresó Buxeda.
Entretanto, el colegial Elmer Alexhandder Zapata, de Ingeniería Química, fue uno de los beneficiados en esta jornada educativa. Para el joven, quien también es representante estudiantil ante la Junta Universitaria del RUM, la vivencia lo ayudó a “cambiar la perspectiva de lo que pensaba que era la biotecnología”.
“De esta experiencia, traje el entendimiento del importante rol que juega la Universidad de Puerto Rico en el desarrollo intelectual. Claro está, esto junto a compañías comprometidas con nuestro desarrollo como Amgen, la que patrocinó el programa. También es relevante recalcar la camaradería que se experimentó en el programa. La acogida de los profesores con nosotros fue muy buena”, manifestó Elmer.
De igual forma se expresó Amalis Y. Hernández, de Microbiología, quien compartió el crecimiento que obtuvo durante la jornada, y al igual que Elmer, enfatizó el compañerismo, ya que “tanto los microbiólogos como los ingenieros llegamos a hablar en el mismo lenguaje” .
“Estas son oportunidades que nos ayudan a visualizarnos. Los talleres sirven para concienciar si realmente esto es lo que te gusta. La visita a Amgen fue sumamente esencial porque todo lo que aprendiste lo puedes ver aplicado y cuando te hablan sobre cualquier cosa; ya no te parece que es en otro idioma y lo mejor es que puedes hacer todas las preguntas que quieras. Personalmente, pienso que la Universidad debería desarrollar programas más prácticos y que sea un requisito".
