El ingenio y la invención de los estudiantes de Ingeniería del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) brillaron con todo su esplendor durante el Open Capstone, una exhibición de las creaciones de los alumnos del curso del mismo nombre.
El Mezaninne de las Canchas de tenis Pedro "Golo" Laracuente del Recinto se convirtió en un gigante exhibidor para sobre 30 prototipos y afiches de proyectos que nacieron de la creatividad estudiantil dirigida por varios profesores del RUM que impartieron la clase de diseño denominada Capstone durante el semestre pasado.
“Muchos de los proyectos que tenemos están respondiendo a necesidades de la industria local, que atienden problemas específicos, y la mayoría de ellos van a ser instalados en las compañías que los están auspiciando”, indicó el doctor Manuel Jiménez, decano asociado de Asuntos Académicos del Colegio de Ingeniería.
Añadió que los estudiantes que toman dicha materia están ya en su quinto año de estudio en alguna de las seis disciplinas de la ingeniería que se imparten en el Recinto: Civil, Computadoras, Eléctrica, Industrial, Mecánica, y Química; así como Agrimensura.
“Ahora ellos aplican todos esos conocimientos adquiridos para resolver estos problemas. Por eso es se le llama el curso de Capstone, porque es la piedra que corona la preparación de estos estudiantes para ellos lanzarle a la industria, a montar nuevos negocios, para lanzarse ya a la vida profesional”, apuntó.
De hecho, el doctor Gerson Beauchamp, otro profesor que imparte el curso y catedrático de Ingeniería Eléctrica, subrayó la importancia de que las creaciones fueron desarrolladas de acuerdo con las necesidades de los clientes, que incluyeron desde individuos, pequeños comerciantes, la industria y hasta el propio Recinto.
“Tenemos proyectos que van desde diseño de complejos deportivos, de apartamentos, hoteles, hasta proyectos para personas con impedimentos, que están en una cama, por ejemplo en un hospital, un sistema mecánico para voltearlos de un grupo de Ingeniería Mecánica. Tenemos otro de una persona que es parapléjica para ayudarlo, con un control remoto, a conducir su bote. En el caso de Ingeniería Eléctrica tenemos una máquina especializada que entrega las recetas a las personas que llegan a la farmacia con una tarjeta de identificación”, detalló.
Precisamente, el grupo denominado Cyamed Engineering, bajo la tutela del doctor Beauchamp, fue el creador del Dispensador automatizado de medicamentos recetados para farmacias. El equipo, compuesto por los jóvenes Cindy Pérez Valentín, Fernando Valdeverde Valle y Miguel Bustelo Correa explicó a Prensa RUM el funcionamiento de su invención.
“Nosotros teníamos la tarea de diseñar una máquina que pudiera automatizar el sistema de recogido de medicamentos de manera tal, que las personas pudieran hacerlo sin tener que pasar con un farmacéutico o con un técnico de farmacia, pagar sus medicamentos, recogerlos y agilizar el proceso”, expuso Pérez Valentín.
El artefacto, que se asemeja a un dispensador comercial de golosinas, utiliza motores, sistemas de control y microprocesadores para lograr que los empleados de la farmacia puedan abastecerla y que el cliente, al hacer uso de una tarjeta de identificación, pueda seleccionar los medicamentos que desea, señalaron.
Mientras, un grupo de estudiantes de Ingeniería Mecánica (INME) desarrolló un sistema que posibilita el mover a un paciente de osteogénesis imperfecta, un trastorno genético conocido como enfermedad de huesos de cristal, condición que debilita los huesos y hace que estos se rompan con facilidad, sin ninguna causa aparente. Los jóvenes destacaron que su invención trabaja manteniendo a la persona en una posición horizontal para ayudarla con el tratamiento de las inevitables úlceras que se sufren por estar permanentemente encamados.
“El prototipo usa una grúa; se pone la tela debajo del paciente y la cierras cubriendo al paciente. Luego, lo levanta, lo gira, lo baja de nuevo y se le remueve la tela… Lo más importante para mí es que voy a ayudar a un paciente que tiene una condición muy extraña y muy severa”, expresó Freddy Madera Jordán. Este grupo lo completan los estudiantes Freddy Rivera Avilés y Manuel Lorenzo.
Premiado el ingenio colegial
Durante ese día, también se llevó a cabo una premiación de los proyectos cuyo primer premio recayó en el Pull System and Visual Signaling Design at a Medical Device Manufacturing Company, un método de manufactura que controla la producción para darle prioridad a lo que el cliente solicite, auspiciado por LifeScan LLC, una división de Johnson & Johnson. El sistema fue ideado por Cynthia Mercado y Melissa Guzmán, de Ingeniería Industrial (ININ), bajo la tutela de la doctora Betzabé Rodríguez.
El segundo lugar lo ganaron Anthony Llanos, Jesús Luzón, Juan Lebrón y Jean C. Méndez, de Ingeniería Eléctrica y de Computadoras (INEL/ICOM), con su AeroBal: An Automated Wind Tunnel. Esta iniciativa mejora el sistema actual del túnel de viento del Departamento de Ingeniería Civil y lo dota de una nueva balanza para medir fuerza, así como de sensores de temperatura, humedad y velocidad de viento, de una pantalla LCD y de una aplicación Android para tener toda la data que se genere en los aparatos móviles que hagan uso de ese sistema operativo. Su tutor fue el doctor Manuel Jiménez.
De igual modo, la tercera posición la compartieron cuatro proyectos: el Dispensador automatizado de medicamentos recetados para farmacias; las Mejoras en la utilización de recursos en el área de limpieza; y las aplicaciones Panda Code Reviews; y Emergency Assistant App Mobile and Emergency Services Application.
El proyecto de las Mejoras en limpieza se diseñó a petición de la Casa del Veterano y su objetivo es proveer a la institución con varias alternativas de distribución de tareas tomando en consideración el número de empleados y el tiempo dedicado a cada labor de limpieza. Este fue producto del ingenio de las estudiantes Jailene Borgos Burgos y Mariana B. Toro Muñiz, con la consejería de su profesora, la doctora María de los Ángeles Irizarry, todas de ININ.
Por su parte, la aplicación Panda Code Reviews, de Nelián E. Colón Collazo, Samuel A. Rodríguez Martínez y Daniel A. Santiago Rivera, de INEL/ICOM, le provee a los profesores un sistema de almacenamiento gratis para codificar y almacenar los trabajos que asignan a sus estudiantes. Sus mentores fueron los doctores Nayda Santiago, Fernando Vega y Gerson Beauchamp.
Asimismo, el equipo Alpacatech le dio vida a las aplicaciones de emergencia para el celular que hacen uso del GPS para ofrecer al usuario los números telefónicos de las agencias de emergencia que ofrecen servicio en el lugar donde haya ocurrido el imprevisto. Este grupo estuvo compuesto por Marvin Pouriet, Ricardo Ayala, Juan De León y Roberto Arias con la mentoría de sus profesores Santiago y Vega, de INEL/ICOM.
Los profesores de Administración de Empresa se desempeñaron como jueces “con la idea de que algunos de los proyectos se conviertan en proyectos empresariales reales”, a juicio del doctor José Vega, director del Centro de Negocios de esa facultad.
Como parte del curso Capstone, los colegiales también visitaron las industrias para conocer de cerca sus problemas y poder trabajar y elaborar las soluciones de los mismos. Ese fue el caso de Fenwal, en San Germán, para la cual los estudiantes desarrollaron una nueva línea de productos, según sostuvo el ingeniero jefe del área técnica de la compañía, Jorge Cabrera.
“Es un reto mayor porque es una línea que no está. Hay muchas cosas que hay que trabajarlas con mucha imaginación porque no hay documentación y hay que crear todo de cero. (Los estudiantes) se han dado a la tarea de diseñar los equipos, de trabajar los layouts, análisis y capacidad, crear toda la documentación de procedimientos, especificaciones y planos”, indicó.