Bajo el lema Una aventura en el hielo y ataviados a la usanza de la película infantil Frozen, los colegiales más pequeñitos disfrutaron de la decimocuarta graduación y promoción del Centro de Desarrollo Preescolar del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).
La ceremonia, que incluyó a 31 jovencitos, 17 se graduaron y pasarán a kínder, mientras que 14 fueron promovidos a prekínder, se celebró en el Anfiteatro Ramón Figueroa Chapel con una decoración que representaba el tan exitoso filme.
"Este decimocuarto reconocimiento a los esfuerzos de los niños del Centro, cobra un significado especial para nosotros, ya que ellos han tomado participación activa en todo el proceso de organización, planificación y ejecución. Vemos plasmada la originalidad, creatividad y talento de nuestros niños. Deseamos que en su caminar sigan demostrando y desarrollando aún más todos esos dones y que la huella colegial trascienda los portones del Recinto hasta donde quiera que vayan. ¡Les auguramos mucho éxito!", dijo Maribel González Torres, directora del Centro.
Las niñas vestidas como Elsa, la reina de las nieves; y los niños, disfrazados del muñeco de nieve Olaf, del príncipe Hans y de Kristoff, desplegaron sus talentos al desfilar sobre el escenario que aparentaba nieve. Asimismo, recitaron versos dedicados a la ocasión especial.
"Mas cuando el tiempo vuele y pasen muchos años, te recordaremos, jamás te olvidaré", declamó con soltura, Francelis Rodríguez, de cinco años.
"Adiós jardín querido, me alejo hoy de ti, crecieron ya mis alas, es hora de partir", replicó Noahdiel Hilerio, también de cinco años con fuerte entonación.
Y no podía faltar el himno del año entre los chiquitos (y también los más grandecitos), Let it Go, interpretado magistralmente por Keily Morales.
La actividad se le dedicó al niño Gustavo A. Figueroa Maldonado.
"Pusiste una canción diferente a cada momento que compartimos juntos. Gracias por el privilegio de conocerte, por habernos regalado tu sonrisa, por enseñarnos que no existen barreras cuando se requiere alcanzar la meta", leía la reseña de dedicatoria.
Como en toda graduación colegial, los niños recibieron sus diplomas de manos del rector del Recinto.
Los asistentes también disfrutaron de un recuento fotográfico del año académico de los pequeños colegiales.