Reflexiones de un maestro hispano
“La educación es un acto de amor, por tanto, un acto de valor”.
El escritor puertorriqueño José Enrique Figueroa presentó su libro Reflections of a Hispanic Teacher, que se llevó a cabo en el edificio Carlos E. Chardón del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM). La publicación ofrece una perspectiva crítica de la educación basándose en sus experiencias como maestro en los Estados Unidos.
“El texto presenta mis reflexiones de 21 años de enseñanza en los trechos del South Bronx y la ciudad de los Yonkers. Además, muestra mi llegada a Estados Unidos como un inmigrante puertorriqueño, y las dificultades de mi familia para que obtuviera una buena educación. Trata sobre lo que viví cuando fui a la escuela y cuando fui maestro”, explicó el doctor Figueroa.
El escritor entrelaza sus vivencias como docente con las teorías pedagógicas, así como historias de su infancia y las tribulaciones de los estudiantes en el aula.
“En muchas ocasiones observé cómo la educación se dividía en grupos sociales. El 51 por ciento de los estudiantes ingresados en escuelas públicas era pobre. En mi caso tener tan solo $ 57 semanales y siete miembros en la familia, era vivir bajo el nivel de la pobreza. Gracias al esfuerzo de mi padre nunca sufrimos de hambre, y siempre tuvimos zapatos”, compartió.
Además, uno de los relatos que cautivó al público fue el de su deseo de crear un museo mientras les enseñaba a sus estudiantes geometría junto con arte.
“Mi esposa es buenísima en el arte y me surgió la idea de despertar la creatividad en mis estudiantes. Entonces, compré de mi propio bolsillo todo lo que se necesitaba y comencé mi trabajo. Laboramos como un gran equipo, algunos niños dibujaban, otros pintaban y otros cortaban los materiales. Al tiempo que se divertían, también aprendían las figuras geométricas. Al final logramos crear un pequeño museo en el salón de clases donde presentamos alrededor de 80 pinturas creadas por 15 alumnos”, expresó.
Asimismo, exhortó a los jóvenes que aspiran a pertenecer al magisterio a que sigan adelante en sus metas.
“Enseñar es algo hermoso. Mientras dicté las clases de arte, aprendí más que nunca. Es un proceso de aprendizaje, un toma y dame todo el tiempo, no es solo pararte al frente, sino que aprendes mientras enseñas”, señaló.
También, indicó que todo maestro debe educar a los estudiantes como lo haría con sus hijos.
“Los niños necesitan que se les enseñe de forma individual; sus necesidades intelectuales, emocionales y de comportamiento no pueden encajarse en un tamaño modelo”, expresó.
La actividad fue organizada por el estudiante Ramón González-Arango López, del Departamento de Ciencias Sociales, quien luego de presenciar una conferencia de Figueroa en la librería El Candil, ubicada en el pueblo de Ponce, invitó al escritor a presentar su libro en el RUM.
“El propósito es poner al tanto a la comunidad estudiantil acerca de la necesidad de una reforma educativa. Se busca que los estudiantes vean la realidad y cómo nos afecta. Es de beneficio para todos por el mero hecho de que somos el producto del sistema educativo y las futuras generaciones también lo serán. El maestro de hoy es el que se encuentra cara a cara con una realidad que hay que cambiar”, puntualizó Ramón.
SOURCE: http://www.uprm.edu/portada/article.php?id=3234 |