Una mirada retrospectiva a los logros en la integración de la universidad con las comunidades, así como un vistazo a los inmediatos y próximos retos fue la gestión que convocó a un grupo de investigadores, académicos, estudiantes, representantes de diversas entidades y líderes durante el Segundo Simposio de Transformación Universitaria desde la Perspectiva Comunitaria, que se celebró en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) del pasado 7 al 11 de abril.
El Instituto Universitario para el Desarrollo de las Comunidades (IUDC), en conjunto con el Centro Hemisférico de Cooperación en la Investigación y Educación en Ingeniería y Ciencia Aplicada (CoHemis), organizaron el evento con el fin de presentar proyectos de investigación y aprendizaje de vinculación entre estos dos entes sociales y educativos en Puerto Rico.
"La Universidad tiene un deber de aportar al desarrollo de la sociedad de la cual es parte, mediante la formación de profesionales, el surgimiento de teorías en las ciencias, de nuevas tecnologías y la promoción de las artes, así como el desarrollo y el bienestar de las comunidades vulnerables", explicó la profesora Luisa Seijo Maldonado, directora del IUDC, entidad que dirige hace más de una década y que incentiva, a través de múltiples cursos y esfuerzos multidisciplinarios, la calidad de vida de los puertorriqueños que viven en sectores de desventaja social y económica.
La también catedrática del Departamento de Ciencias Sociales se mostró sumamente entusiasmada porque el Simposio se concibió como un foro donde convergerían las voces de colegas que están haciendo un trabajo cónsono al del IUDC. Para ello contaron con el auspicio y participación de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico (PUCPR), e igualmente con la representación de los recintos de Río Piedras y Humacao de la Universidad de Puerto Rico (UPR).
"Es una experiencia maravillosa, entendemos que este Segundo Simposio nos abre un nuevo hito en el Instituto, sobre todo, en algo que para nosotros es medular: la integración de las distintas unidades académicas del Sistema UPR, con universidades hermanas, con lo que es nuestra responsabilidad con el desarrollo social del archipiélago puertorriqueño", reiteró.
Concurrió el director de CoHemis, doctor Fernando Gilbes Santaella, quien recalcó la relevancia de la labor que realiza el hermano y colega Instituto con el que ha colaborado en calidad de catedrático del Departamento de Geología y al que considera parte fundamental de la misión del Recinto. De hecho, cuando Seijo Maldonado le solicitó apoyo con la actividad, no dudó en formar parte de esta reunión.
"Para nosotros es bien importante la responsabilidad comunitaria que lleva a cabo el Instituto en Puerto Rico y uno de los objetivos que quisiéramos realizar es que ese trabajo se pueda llevar a otros países. Este Simposio nos sirve como un preámbulo a esa colaboración que deseamos desarrollar, que podamos llevar a estudiantes a hacer trabajo comunitario en otros países y que de esas naciones vengan personas a la isla a compartir sus experiencias", aseveró el doctor Gilbes Santaella.
Precisamente, hacia esa ruta internacional comenzaron a encaminarse con la presentación, como invitado especial, del profesor Felipe Orozco, del Instituto Tecnológico del Cibao Oriental (ITECO) al norte de la República Dominicana, quien tuvo a su cargo la conferencia Educación superior que se consolida en el patrimonio de la comunidad.
"Hoy vamos a conversar sobre cómo las comunidades y las universidades deben unirse con el objetivo de cambiar actitudes, de crear proyectos para generar desarrollo, vivir en mejores condiciones de vida. Muchas veces las universidades y las comunidades están cada una por su lado, entonces la propuesta que traemos es de cómo nuestra institución funciona, cómo hemos tratado de fusionar esa relación, de disminuir la brecha", destacó Orozco, al tiempo que enfatizó en la necesidad de establecer una igualdad que permita correspondencia entre los académicos y los ciudadanos para que esa relación sea beneficiosa recíprocamente.
El evento se inauguró en el Anfiteatro del Edificio de Administración de Empresas (ADEM) del recinto mayagüezano de la UPR, anfitrión del Simposio, con los saludos protocolares de los doctores John Fernández Van Cleve, rector; Francisco Maldonado Fortunet, decano de estudiantes; la profesora Ana Martin, decana de ADEM; y el doctor Robinson Rodríguez, catedrático de Ciencias Agrícolas y coordinador del Área programática de los recursos de la comunidad del Servicio de Extensión Agrícola. También se unieron con emotivos mensajes los organizadores, doctores Seijo Maldonado y Gilbes Santaella.
"Nuestra misión es proveer profesionales educados, pero también contribuir al desarrollo social del país, por eso este Simposio vivifica esa imprescindible área, porque nos lleva a consolidar ese patrimonio educativo. Todas las alianzas, programas, e iniciativas en beneficio de las comunidades que vean su primera luz y que tengan como cuna a la universidad, serán transformadoras para nuestra sociedad y para nuestros estudiantes. Este vínculo tiene que ser permanente, participativo y necesario", afirmó el Rector, al tiempo que realzó la labor "monumental" que históricamente ha hecho y continúa el IUDC con todos los desafíos que implica esa faena.
El comienzo de la jornada contó con varios invitados a cargo de exponer sus programas de integración de la universidad y comunidades en sus instituciones. El primer panel lo integraron las doctoras Dolores Miranda, del programa CAUCE del Recinto de Río Piedras de la UPR; Sandra Ramos, del Centro de Aprendizaje en el Servicio de la PUCPR, y el profesor Orozco en representación del ITECO. También se unieron las doctoras Ivelisse Rivera Padilla del Recinto de Humacao de la UPR y Ann Macpherson, del RUM.
El Simposio se celebró al día siguiente en la Católica en Ponce y retomó su curso en el Recinto mayagüezano con las conferencias Gobierno y Organizaciones no gubernamentales, con representantes de la Compañía Integral para el Desarrollo de la Península de Cantera, el Centro Sor Isolina Ferré y el Centro para Puerto Rico de la Fundación Sila María Calderón. Incluyó otros paneles como: Ciencia, tecnología y arte en las comunidades, Alianzas: Estrategias y experiencias para el desarrollo de las comunidades, y Alianza Interuniversitaria para una ética de convivencia, dictada por el Padre Pedro Ortiz de la Universidad del Turabo. Asimismo, se realizaron varios talleres a los que se incorporaron recursos colegiales que han formado parte del trabajo de IUDC.
Los participantes continuaron sus trabajos con una visita a la cuna de Eugenio María de Hostos, en el barrio Río Cañas, en el museo en su memoria en Mayagüez. En ese escenario, presenciaron la conferencia Hostos comunitario: poder social, por el doctor Roberto Mori, distinguido con la Cátedra Especial de ese ilustre prócer puertorriqueño. La agenda culminó con la celebración de la cumbre de organizaciones para el Desarrollo de las comunidades.