Evocan Aņo Internacional de los Suelos
“You can’t grow anything without good soil”.
Una exposición de afiches, una conferencia magistral y la presentación de la película The Symphony of the Soil, formaron parte de los eventos con los que el Departamento de Ciencias Agroambientales del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), inició la conmemoración del Año Internacional de los Suelos. La celebración responde a la declaración de la Asamblea General de las Naciones Unidas para enfatizar en la importancia de este recurso natural durante el año 2015. Mediante las actividades, pretendieron recabar en la trascendencia de los suelos en la vida de los puertorriqueños, las funciones y servicios que estos ofrecen y cómo recuperar y manejarlos de manera sustentable. Así lo dio a conocer el doctor David R. Sotomayor Ramírez, quien junto a María R. Suárez Rozo, organizaron la jornada. Como antesala, el patio interior del edificio Jesús T. Piñero, fue el escenario donde se proyectó el cortometraje The Symphony of the Soil, en el que se explora la complejidad y el misterio del suelo. La velada reunió a alrededor de 50 personas, quienes además, degustaron café gratuitamente, como obsequio de la PanAmerican Fertilizer Corporation. Al día siguiente, se continuó con la exhibición de afiches para la que los participantes sometieron sus propuestas electrónicamente y en la que desplegaron su creatividad para educar y concienciar a la población. Esta muestra es parte de una colección permanente que puede accederse desde la página cibernética de la Estación Experimental Agrícola en: suelos2015.eea.uprm.edu. Un jurado compuesto por: la profesora Claudia Torres Guillemard, del Departamento de Humanidades del RUM; Edwin Mas, en representación del Departamento de Agricultura Federal; y Javier González, por el Colegio de Agrónomos, tuvo la tarea de evaluar los proyectos estudiantiles. Entre los criterios, consideraron los elementos artísticos empleados y la proyección del mensaje educativo. Los ganadores de los premios en metálico fueron: en primer lugar, con $ 250, Joel Mercado Reyes, de Horticultura; $ 150, para Gianfranco Santaliz Rogers, de Extensión Agrícola; y $ 100, para Wesley Velázquez Augusto, de Agronomía. Asimismo, se les otorgó una mención honorífica a: Noelymar González Maldonado, Ilsia Ortiz Lara, Cristina López, y Natalia Pérez Betancourt, quienes recibieron el Atlas de Suelos de América Latina y el Caribe. El doctor Sotomayor destacó que les impresionó la expresión artística de los alumnos, quienes provenían de distintos departamentos del RUM y hasta contaron con una representación de la Universidad de Puerto Rico en Utuado. Esto cumplió el propósito original del comité organizador que se fijó como meta lograr una amplia respuesta con la convocatoria. Acto seguido, se integró el doctor Thomas Reinsch del USDA-NRCS, quien ofreció la conferencia magistral de la ocasión, titulada: Perspectiva global de uso sustentable de los suelos en el Caribe. Durante su alocución, el experto compartió cómo se recopilan los datos sobre el suelo caribeño y qué falta por aprender acerca del mismo. “Nos sentimos muy honrados por la participación del doctor Reinsch, a quien conocí durante un Congreso que se realizó en Perú. Allí le expresé mi interés por hacer algo educativo y para que hablara desde su experiencia como funcionario en la World Soil Resources”, señaló. De hecho, su visita sirvió para reunirse con el funcionario como parte del acuerdo colaborativo entre el NRCS y el recinto, proyecto que lidera el doctor Miguel Muñoz. Por su parte, Sotomayor enfatizó que uno de los más grandes retos que enfrenta la agricultura radica en combinar el cuidado que requiere el terreno, al mismo tiempo que se promueve la actividad agrícola. “Tenemos la responsabilidad de devolverle lo que le sustraemos y dejarlo tal vez, en un mejor estado que cuando comenzamos a trabajarlo. Esto debe ser lo más amigable al ambiente posible”, sostuvo. En el caso de Puerto Rico, se cuenta con alrededor de 180 diferentes tipos de suelos, palpables a la vista y que pueden medirse por medio de distintos parámetros. Esa diversidad determina los cultivos que adaptan mejor a la alcalinidad o al nivel de pH del terreno. Agregó que están comprometidos en concienciar al puertorriqueño sobre la importancia de conservar los terrenos agrícolas, aun cuando aparentan no utilizarse para ese propósito. “Para nuestra población, según la zona geográfica, la tasa de pérdida es demasiado alta. Ese espacio sigue estando ahí, pero no contamos con la función que puede realizar. En nuestro caso, nos interesa para producción de cosecha, animal, pero vemos una gran tendencia de emplearlo para soporte de estructuras y recreación, pero eso no produce comida”, enfatizó. El catedrático señaló que aspiran a que la actividad agrícola resulte lo más amigable al ambiente posible, sin entrar en conflicto con los ambientalistas ni con los constructores de viviendas. Las festividades correspondientes al Año continuarán hasta que el 4 de diciembre se conmemore el Día Internacional de los Suelos. SOURCE: http://www.uprm.edu/portada/article.php?id=3322 |