¿Quién preside? De Hostos desde Hostos

Como parte de las actividades del centésimo septuagésimo séptimo aniversario del natalicio de Eugenio María de Hostos y Bonilla, el Proyecto Arte Escénico Colegial (PAEC) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), presentó en el Museo, que lleva el nombre del mencionado prócer, la obra titulada ¿Quién preside?  de la autoría del mayagüezano conocido como el Ciudadano de las Américas.

 

La pieza, que inauguró con mucho éxito durante el mes de diciembre en el Anfiteatro de Administración de Empresas (ADEM) del Colegio, es una obra teatral infantil que De Hostos y Bonilla escribió para sus hijos. 

 

En la obra, que dirigió la doctora Noemí Maldonado Cardenales, catedrática de Humanidades del Recinto, actuaron la doctora Lydia Margarita González Quevedo (Maestra Pimienta), el doctor René Vieta (Maestro Cebolla), Luis Guadalupe Zambrana (Maestro Ciruela) e Idem Osorio De Jesús (Maestra Flor del Bosque).

 

El texto de ¿Quién preside?, aunque fue escrito para niños, es una crítica social sobre la lucha de poder y el debate entre dos escuelas distintas de pensamiento magisterial. Cebolla y Ciruela defienden la escuela tradicional. Mientras, Pimienta y Flor del Bosque, favorecen la nueva escuela. Finalmente, los que toman las decisiones escogieron a un favorecedor de la tradición, el maestro Ciruela, para presidir.

 

“Es una obra que se escribió en 1888, pero es un tema vigente, porque tanto en el mundo político, como en el académico, tenemos estas luchas de poder y resistencia hacia lo nuevo. Cada vez que íbamos leyendo y analizando, decíamos: ‘en algún momento de nuestras vidas nos encontramos con algunas de estas etapas’ ”, afirmó Maldonado Cardenales.

 

En sus tres funciones, tanto en ADEM como en el Museo, el pasado, 12 de enero, la pieza tuvo una gran acogida de la audiencia.

 

“Estoy bien contenta y agradecida. La experiencia con el elenco ha sido excelente porque todos tienen un elemento que es vital: disciplina. Aprender de mis colegas en el proceso del montaje, fue una obra dentro de la obra”, puntualizó la profesora, quien además de liderar el colectivo PAEC, dicta las clases de actuación en el RUM.

 

Relató que siempre tuvo la obra es perspectiva, ya que cuando inició sus labores como profesora –hace unos ocho años- su colega González Quevedo, le pidió que la montara. 

 

“Ha sido un experiencia bien hermosa, muy retante, pero muy enriquecedora al mismo tiempo. En 1989 escribí un texto sobre esta obra, y participar en ella, me ha dado nuevas dimensiones. Además, es la primera vez que actúo”, dijo, por su parte, González Quevedo, también catedrática de Humanidades.

 

Asimismo explicó, el porqué una pieza dedicada a los pequeños, a lo que Hostos y Bonilla denominaba ‘las nenerías’, tiene tanto valor didáctico. 

 

“Todos estos grandes pensadores y pensadoras tratan a la niñez como adultos. Esta obra la escribe para sus hijos e hijas, y los vecinitos la representen con toda la profundidad que implica la carga política, educativa, racial, feminista que tiene la misma. Así que es un mensaje bien importante para nuestros educadores y educadoras que hay que empezar esa educación liberadora, hostosiana desde el preescolar porque sino se empieza ahí, no se va a dar, porque ya después es muy tarde”, enfatizó González Quevedo.

 

Por su parte, el doctor René Vieta, catedrático jubilado de Química, describió la participación en este proyecto como “única”.

 

“Para mí, ha sido una inyección de ánimo. Comenzamos con cuatro actores a distintos niveles de experiencia y logramos optimizar el aspecto de actuación. La obra no requiere una escenografía complicada, ni grandes efectos de sonido y luces, así que el impacto de la pieza estriba en la actuación y nosotros, afortunadamente, lo logramos”, sostuvo.

 

Como ya caracteriza al sello PAEC, además de profesores, estudiantes y empleados, la puesta en escena también contó con familiares de los integrantes de la comunidad colegial. En esta ocasión, tuvo la colaboración de Guadalupe Zambrana, esposo de Irene Ocasio Torres, del Decanato de Asuntos Académicos.

 

“Fue una gran oportunidad. Estoy fascinado por ver la reacción del público. Me alegra haberme unido a este excelente elenco. Ha sido un honor trabajar con ellos”, puntualizó.

 

Del mismo opinó, Osorio De Jesús, de la Oficina de Prensa, quien fue parte, por tercera ocasión, de una iniciativa actoral de PAEC.

 

“La obra tiene mucha vigencia, ya que toca temas como la apertura  hacia lo nuevo, la equidad de género, y darle la oportunidad a la nueva generación. La experiencia ha sido maravillosa. Esa integración de esfuerzos hace que el proyecto sea uno de excelencia", afirmó. 

 

La presentación en el Museo de Hostos, contó con un público muy especial, compuesto por una delegación de educadores de República Dominicana y el bisnieto del prócer, Gustavo Adolfo de Hostos.

 

“He quedado impresionado de cómo fuimos recibidos en Mayagüez y estoy muy agradecido.  Muy poca gente sabe que mi bisabuelo hizo piezas de teatro, pero él tenía una pluma para cualquier tipo de literatura, y él, como bien dijo la profesora Lydia Margarita González Quevedo, en las nenerías, con los nenes, tenía estas piezas de teatro para sus hijos. Hicieron un trabajo excepcional y es un mensaje que tenemos que llevar a la juventud. Si hay algo que quiero resaltar el día de hoy es que tenemos la obligación de conectar nuestra juventud con Eugenio María de Hostos, a través de estas piezas, pero también con el positivismo”, concluyó.