El Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) y la Asociación de Puerto Rico de Biotecnología Industrial Agrícola (PRABIA) suscribieron un acuerdo de colaboración con el objetivo de impulsar la educación e investigación en el sector de la biotecnología agrícola, mediante iniciativas que incluyen el fortalecimiento de currículos académicos, el desarrollo de tecnologías innovadoras, la celebración de conferencias, simposios, talleres y programas de práctica, entre otras.
“Parte de nuestra misión, como institución educativa, es establecer vínculos con la industria que permitan que nuestros estudiantes tengan acceso a los procesos y tecnologías de punta de lanza. Muy especialmente en los temas relacionados con la agricultura, que son tan relevantes para nuestro desarrollo como país. Esta alianza permitirá que reforcemos los proyectos en el área de biotecnología agrícola y abrirá las puertas para nuevos campos de investigación", indicó el doctor John Fernández Van Cleve, rector del RUM.
El acuerdo incluye esfuerzos, tales como la participación de ambas partes, como asesores expertos en comités profesionales y académicos; el desarrollo de currículos actualizados para cursos que se ofrecen en la Escuela de Ciencias de la Agricultura, integrando nuevas tendencias en el campo; talleres de AgBio para estudiantes y facultativos; acceso para que los colegiales realicen sus investigaciones, así como reclutamiento de universitarios para empleo en las compañías adscritas a PRABIA; el desarrollo del programa de becas e internados, entre otros.
“El desarrollo de la industria de biotecnología agrícola es medular para el presente y futuro del planeta, ya que incluye temas de vital importancia como la producción y seguridad de alimentos, la salud y nutrición, y la hambruna en un mundo en crecimiento. Puerto Rico tiene un rol vital en estos asuntos, por lo que, con este acuerdo, buscamos unir esfuerzos y aumentar el conocimiento en estas áreas por medio de la educación e investigación”, señaló, por su parte, Beatriz Carrión, directora ejecutiva de PRABIA.
Asimismo, el agrónomo Rafael Molinary, vicepresidente de la mencionada entidad, esbozó los beneficios bilaterales de la alianza.
"Es una ventaja, no solo para los jóvenes que están estudiando Biotecnología y Agricultura en el Recinto de Mayagüez, sino para la industria también porque básicamente dependemos de estos técnicos para hacer el trabajo. A muchos se les ofrece la primera oportunidad de empleo, se le adiestra en todas las áreas, incluyendo supervisión y usualmente, cuando tenemos plazas, los reclutamos", puntualizó.
El acuerdo, una vez más, destaca la importancia de la colaboración interagencial.
"Por una parte, nos está proveyendo posibilidades de realizar investigaciones, tanto subgraduadas como graduadas, en áreas tan diversas como la biotecnología agrícola, el manejo integrado de plagas, estudios de fertilidad, calidad de suelos, uso eficiente de aguas y distintos tipos de trabajos, todos relacionados con los cultivos", expresó el doctor Raúl E. Macchiavelli, decano de Ciencias Agrícolas.
Mientras, el doctor Manuel Valdés Pizzini, decano de Artes y Ciencias, facultad que alberga a los programas de Biotecnología y Microbiología Industrial, resaltó el valor del componente interdisciplinario de la alianza.
"Nosotros preparamos a estudiantes para trabajar en investigación y aportar tanto al sector privado como público. Nuestro programa de Biotecnología también tiene sus vínculos estrechos con Ingeniería Química. Así, logramos crear una sinergia, primero aquí y luego, la trasladamos a ese acuerdo con PRABIA. De manera tal, que podamos llevar a la industria a estudiantes sumamente capacitados en investigación y aportar de manera seria y crítica a lo que eventualmente conduce al importante tema de la seguridad alimentaria a escala global", enfatizó.