Dieciséis jóvenes de escuela superior participaron durante 30 días en el Instituto de Verano de Transportación del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM). Se trata de una experiencia de inmersión, cuya sede fue el Departamento de Ingeniería Civil y Agrimensura, en la que los preuniversitarios llevaron a cabo múltiples actividades, desde construir puentes hasta presentar sus investigaciones.
"¡Llevamos 16 años celebrándolo! Les proveemos información y los integramos a diferentes experiencias relacionadas con la transportación. Lo que buscamos es que se interesen por esa carrera futura", indicó el doctor Antonio González Quevedo, decano interino de Asuntos Académicos y uno de los colaboradores del campamento.
La jornada incluyó los eventos educativos e interactivos dentro del Recinto, así como visitas de campo en el área metropolitana.
"Les mostramos a los estudiantes proyectos de infraestructura, de operación, de sistema de transportación, y cómo se involucran los profesionales en esas diferentes áreas del saber. También les permite familiarizarse con diferentes aspectos de la Universidad. Aparte de eso, hacemos unos proyectos, uno es de un puente de madera de balsa, a escala, que se construye acá, lo diseñan en un programa de computadora y después hacemos unas pruebas y compiten entre sí los diferentes grupos. Además, hacen unos carritos solares, porque es importante ver ese otro concepto del uso la energía de manera ecoamigable. En lo que son los sistemas de transportación, hacemos otro proyectito de un catamarán en madera de balsa, pero en escala pequeña", explicó el doctor Didier Valdés, uno de los coordinadores del Instituto, quien además es decano asociado de Asuntos Académicos y Director de la Escuela Graduada del RUM.
La educación recibida durante el campamento le ayuda a sus participantes a sentar las bases para una futura carrera universitaria.
"Me ha ayudado mucho aprender sobre la ingeniería civil, específicamente en transportación. Estamos trabajando una iniciativa de investigación durante todo el mes, haciendo proyectos cortos, puentes, catamaranes y muchos modelos. Le recomiendo esta experiencia a otros jóvenes, ya que te ayuda a aprender más sobre la vida universitaria", precisó Miguel Manzano, estudiante de la Academia Inmaculada Concepción, en Mayagüez.
Por su parte, Mariana Camacho, de la Escuela Bilingüe Sergio Ramírez de Arellano, en Añasco, también disfrutó mucho la vivencia veraniega.
"La experiencia me ha gustado un montón. He aprendido acerca de todo, de terremotos, de puentes, de cosas que no pensaba que eran necesarias. Ha sido muy bueno. He conocido a varias personas que me han ayudado con mi área académica", señaló.
De hecho, ambos jóvenes, que pronto cursarán el décimo grado, planifican estudiar Ingeniería en un futuro cercano.
"El Instituto es como un ajuste a la vida universitaria que también le sirve para sus escuelas, porque a ellos todavía le quedan grado 11 y 12. Esta es una forma para que se vayan familiarizando con el tipo de asuntos que tienen que tratar y conocer cuando vienen a la Universidad", puntualizó Valdés.
Video reportajes disponibles en:
Celebran campamento de verano de transportación en el RUM-2016
