Investidos con batas blancas, emblemáticas de que llevan a cabo una tarea científica, 24 estudiantes de escuela superior exploraron, en una semana, los alcances de la ingeniería farmacéutica, área enfocada en la solución de problemas en el diseño y producción de medicamentos de alta calidad. Fue así, que en la sexta edición del campamento que se especializa en la mencionada disciplina -conocido como PEsCA 2016- tuvieron la oportunidad de crear pastillas y experimentar todo el procedimiento que conlleva.
La jornada educativa, liderada por el doctor Carlos Velázquez, director del Centro para el Desarrollo y Aprendizaje de la Ingeniería Farmacéutica (C-PEDaL), adscrito al Departamento de Ingeniería Química del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), ha impactado a 144 jóvenes, durante su trayectoria.
"Nosotros estamos supercontentos, porque realmente estamos viendo ahora los frutos del primer campamento. Cerca del 80 por ciento de los que han participado, solicitó estudios en el RUM, y aproximadamente la mitad de esos, ha optado por Química o Ingeniería Química. Así que estamos viendo un impacto enorme. Nuestra meta es seguir corriendo el campamento PEsCA por los próximos años. Lamentablemente, este es el último año que recibimos la subvención de la Fundación Nacional de las Ciencias, así que vamos a buscar fondos para seguir", indicó el catedrático.
La experiencia ha sido transformadora para los participantes. Así lo constataron a Prensa RUM, Nayra L. Salas González y Héctor González Laracuente, ambos de cuarto año de escuela superior.
"¡Me ha encantado! Jamás pensé tener esta oportunidad. He aprendido un montón. Además de llevarnos a las industrias farmacéuticas, hemos puesto en práctica todo lo que nos han enseñado sobre el procedimiento de cómo crear una tableta", expresó la joven de 17 años, estudiante de la Escuela Patria Latorre, de San Sebastián.
Por su parte, Héctor agradeció el esmero de los instructores que, a su vez, son colegiales subgraduados y graduados del Recinto.
"Lo más que me ha gustado es la dedicación con la que nos enseñan y nos presentan cada una de las máquinas que están expuestas aquí en el laboratorio, y cómo los líderes de este campamento nos han explicado su funcionamiento para que nosotros podamos utilizarlas correctamente. Uno de los procesos que más me gustó se llama el revestimiento de la tableta, el propósito es que le vamos a dar esa identificación a la tableta para saber cuál es", dijo el alumno del Colegio Ponceño.
Le semana de inmersión en los procedimientos de la industria farmacéutica, les ayudó a los campistas a definir su carrera y anticipar lo que experimentarán en la vida universitaria.
Video reportajes disponibles en:
Sexto campamento de Ingeniería Farmacéutica en el RUM
