Como parte de la serie de Jóvenes Virtuosos Puertorriqueños de Presencias, el Anfiteatro Ramón Figueroa Chapel acogió los acordes del violonchelo de Hazel Thais Rivera Rosario. Acompañada en el piano por el maestro Luis Manuel Tirado, la talentosa joven incorporó ocho números en los que mezcló la música clásica, puertorriqueña y contemporánea, así como una pieza de su autoría, como muestra de la variedad de su estilo.
El repertorio clásico incluyó: Concierto para violonchelo en la menor, Op. 129, de Robert Schumann; Variaciones sobre un tema Rococó, Op. 33, de Pyotr Illych Tchaikovsky; Sonata para violonchelo en mi menor, No. 1, Op. 38, de Johannes Brahms; y Oblivión, de Astor Piazzolla. Mientras, la colección puertorriqueña de la segunda parte abarcó: Perla del Caribe, de Jesús María Escobar; Tú y yo, de Ángel Mislán; Se siente en el corazón, de Hazel; e Improntu, de Luis R. Miranda.
Este concierto representó la tercera ocasión en que el Proyecto Integral de Cultura del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) se convierte en una plataforma para exponer el talento artístico de los futuros músicos concertistas de Puerto Rico. Y es que, se trata de un caso muy particular, pues con tan solo 17 años de edad, esta joven cursa su cuarto año de estudios en el Departamento de Ingeniería Mecánica del RUM al mismo tiempo que completa un bachillerato en ejecución de violonchelo en el Conservatorio de Música de Puerto Rico (CMPR).
En un aparte con Prensa RUM, la colegial comentó acerca de cómo combina su fase como estudiante de ingeniería con la de músico.
“Todo el mundo dice que son materias diferentes, pero en realidad se conectan entre sí, porque la música tiene mucha ciencia, mucha matemática, todo se combina. Estudio mucho, practico todos los días; porque es lo que me gusta”, expresó.
Su extraordinario talento le acercó a las puertas del Colegio a los 14 años, decidida a prepararse en ingeniería paralelamente a sus estudios formales en el CMPR. Según reveló, se sintió halagada al poder mostrar su talento en su alma mater, gracias a Presencias.
Durante el concierto, Hazel dio rienda suelta a su virtuosismo, al interpretar piezas de considerable complejidad, confiada en la destreza de sus manos, pero también en su gran capacidad de memoria. Así lo señaló el doctor José Antonio López Torres, director artístico del proyecto y catedrático del Departamento de Humanidades.
“
Presencias es un espacio en Puerto Rico para exponer los futuros músicos de concierto en la isla. De hecho, fue gracias a la clase magistral que dictaron los hermanos
Martos Lozano como parte de la cuarta temporada, donde Hazel fue seleccionada entre los jóvenes violinistas y chelistas que participaron. Ella cuenta con una gran capacidad interpretativa, intensidad y pasión que la distinguieron para integrarse a nuestra
Serie de Jóvenes Virtuosos”, aseguró.
Por otra parte, el maestro Tirado elogió a Hazel, a quien calificó como “de las mejores del mundo, por su genialidad y ejecución, por lo que representa un privilegio para mí, poder tocar para ella”, sostuvo antes de interpretar juntos Improntu.
Sus destrezas en el instrumento de cuerdas comenzaron a desarrollarse desde que Hazel contaba con dos años de edad, motivada por los conciertos a los que sus padres la llevaban desde pequeña y en los que seleccionó el cello por su similitud a la voz humana, sonido y registro.
Precisamente, su padre, Héctor Rivera, se mostró orgulloso y agradecido por la oportunidad de que Hazel se diera a conocer en esta faceta dentro del Recinto.
En el RUM, la joven es parte del equipo colegial SAE Aero Design, que se encarga de diseñar aviones y también pertenece, desde hace un año, a la Orquesta de Cuerdas del Departamento de Banda y Orquesta. Mientras se educa profesionalmente en ingeniería y música, continúa activa con su proyecto Tras las notas de mi violonchelo, con el que busca dar a conocer este instrumento de manera amena en distintos centros educativos del país.
Asimismo, cuenta con una producción musical, titulada Se siente en el corazón, dedicada a la música puertorriqueña con danzas, boleros, una pieza de Pablo Casals y la pieza compuesta por ella.
La joven aspira a continuar estudios graduados en el campo aeroespacial una vez culmine sus dos bachilleratos en el RUM y en el CMPR.
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