Por catorce años, el Programa de Biotecnología Industrial del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) se ha enfocado en dar a conocer las oportunidades profesionales y en exaltar la innovación que existe en esa rama de la ciencia, a través de la celebración de su Semana de la Biotecnología.
Esta decimocuarta edición del evento no fue la excepción, ya que bajo el lema Biotecnología Industrial: Forjando científicos mediante la empatía y la solidaridad, se promovió esa disciplina como un ente para el desarrollo de profesionales preparados académicamente y solidarios con las necesidades del país, según explicó la doctora Patricia Ortiz Bermúdez, coordinadora del mencionado programa.
“Siempre se realiza la tercera semana de septiembre; pero todos sabemos qué ocurrió aquí en Puerto Rico, en ese momento. Así que luego del huracán, fue necesario posponerla y decidimos distribuir estas actividades a lo largo del semestre que está en curso y del próximo. Una de las razones por la que quisimos hacerlas, de todas maneras, es que nosotros tenemos un lema que lo habíamos establecido desde antes del ciclón que, ahora más que nunca, nos va como anillo al dedo. Deseamos como quiera llevar a cabo esas actividades y una es esta, en la que nuestro invitado va a ofrecer un taller sobre el tema de mindfulness en la educación”, explicó la también catedrática del Departamento de Ingeniería Química.
Precisamente, fue el doctor Mauricio Conejo, director del Instituto de Neurociencia de Puerto Rico, quien tuvo a su cargo la conferencia plenaria del evento sobre el tema que en castellano se traduce como atención plena o plena conciencia y que se considera una filosofía que propone que se debe vivir el tiempo presente con total plenitud, sin preocuparse por lo que ocurrió en el pasado ni por lo que sucederá en el futuro.
“Lo que queremos abordar es la práctica del mindfulness y cómo esta propicia el aprendizaje; cómo cambia el cerebro y cómo se ha llegado a la conclusión de que ayuda muchísimo en problemas de dolor crónico, ansiedad y depresión. Aunque no es una práctica necesariamente nueva, parece estar en casi todas las corrientes filosóficas del mundo en los años recientes y ha habido un interés por parte de la ciencia en entender cuál es el mecanismo por el que funciona”, detalló a Prensa RUM el conferenciante.
Durante su interesante alocución, que tuvo lugar ante casa llena en el anfiteatro del edificio Luis De Celis, el ponente, quien además es profesor en la Escuela de Artes Plásticas y Diseño de Puerto Rico, sostuvo que el mindfulness genera un mejor manejo de emociones porque trabaja con la parte prefrontal del cerebro, en donde se procesan las funciones ejecutivas principales, como el habla y la toma de decisiones; además de que aseguró que reduce la actividad en el área límbica cerebral, la que permite que el ser humano reaccione ante el miedo o cualquier situación de peligro.
“Realmente, el mindfulness no es un concepto nuevo. De hecho, es una práctica milenaria de contemplación y, como dije, está presente en la mayor parte de las filosofías del mundo. Sin embargo, el interés de las ciencias sobre esta entiendo que se da gracias a que tenemos herramientas no invasivas con las cuales podemos observar el cerebro mientras está en un estado de meditación. Es gracias a las neuroimágenes que podemos determinar qué áreas se activan mientras estamos practicando el mindfulness y porqué propician estas funciones. Por lo tanto, dentro del contexto científico podríamos decir que la neurociencia cognitiva y las neuroimágenes han ayudado muchísimo a poder entender cómo es que el mindfulness funciona y el porqué de esa actividad”, sostuvo el experto.
Esta plenaria se unió a otros eventos como la conferencia que ofreció el doctor Adolfo Plazaola, científico senior de Lilly del Caribe, quien disertó sobre las tendencias en la industria de la fermentación; al igual que el reconocimiento que se le dio a los alumnos destacados del Programa. También, en conjunto con Come Colegial, organización estudiantil cuya misión es que todos los alumnos tengan por lo menos una comida al día, se ofreció un almuerzo, iniciativa que benefició a sobre cien estudiantes.
De igual forma, la profesora Wilma Santiago Gabrielini, rectora interina del RUM, entregó una proclama en conmemoración de la celebración.
“El Programa de Biotecnología Industrial del Recinto, en un marco de enseñanza interdisciplinaria, surge de la colaboración entre las Facultades de Artes y Ciencias e Ingeniería; y cuyos estudiantes reciben el conocimiento fundamental y aplicado, en áreas relacionadas con la biotecnología, complementado con valores socio-humanísticos, éticos y de servicio, con el fin de crear un universitario empático y solidario que se desempeñe como un profesional de excelencia”, reza el documento.
Como parte de la Semana, y de acuerdo con la doctora Ortiz Bermúdez, otras actividades como talleres para maestros y estudiantes de escuela, se realizarán próximamente.
“Nosotros siempre decimos que el Programa recibe a los mejores estudiantes de escuelas públicas y privadas de Puerto Rico y el compromiso es grande para poder proveerle las oportunidades de aprendizaje necesarias para que se puedan desarrollar en este campo que sigue siendo, al día de hoy, uno de frontera para la industria en la isla”, manifestó.
La Semana de la Biotecnología del RUM se originó en el año 2004 con la misión de fortalecer el currículo de ese programa académico y los lazos con la industria.