En mi corazón están inscritas las palabras de
antes, ahora y siempre… ¡Colegio!”
Silverio Pérez
Silverio Pérez visitó su alma mater, el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR), para ofrecer una charla motivacional a los integrantes de Come Colegial. La actividad, abierta a la comunidad universitaria, tuvo lugar en el Anfiteatro del edificio Josefina Torres Torres del RUM.
Con su característico humor, Silverio compartió con los asistentes su experiencia como estudiante del otrora Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas (CAAM) al que llegó procedente del pueblo de Guaynabo y bajo unas condiciones económicas similares a las de los alumnos que se benefician de la mencionada asociación estudiantil.
“Tan pronto se me acercaron para pedirnos que viniéramos, nos pareció importante hacer lo necesario para lograrlo, porque entiendo, que esta iniciativa de Come Colegial, al igual que otras que hemos visto en los recintos de Ponce y Río Piedras (de la UPR), son de muy poco conocimiento público y entiendo que son una demostración de lo que es la solidaridad y el compromiso de los estudiantes más allá de lo que usualmente sale en la prensa que hacen”, indicó Pérez.
El humortivador destacó que su visita pretendió alentar a los que participantes del programa y, por otro lado, ayudar a que se difunda la gesta estudiantil que se originó en el RUM.
“Cuando llegué a estudiar a Mayagüez, vine de un hogar sumamente pobre. De hecho, escogí Mayagüez porque era la universidad que los ingresos de mis padres podían sostener. No vine a estudiar ingeniería, sino a vivir la experiencia universitaria que otros compañeros míos vivirían en Estados Unidos”, señaló.
Así, entre anécdotas, Silverio habló sobre sus vivencias en el Colegio, entre las que mencionó que aquí se topó con su realidad económica al momento de solicitar beca.
“Me di cuenta de que era pobre. No me había enterado antes porque estaba acostumbrado a vivir mi vida en el campo, donde no me comparaba con otros medios; por lo tanto, lo que yo vivía, no sabía que a eso se le llamaba pobreza. Yo sabía que algunas tardes mi mamá no tenía qué cocinar y nos decía, con mucha tranquilidad y paz espiritual: ‘salgan por ahí y busquen algo para comer porque no hay’. Yo no lo veía como un asunto de vida o muerte, sino como algo natural. Salíamos, sacábamos un ñame o tumbábamos una pana o cortábamos un racimo de plátanos… Éramos vegetarianos por necesidad”, sostuvo, arrancando carcajadas entre los asistentes.
De hecho, según expresó, aunque se trataba de otros tiempos, si hubiese sido hoy día, hubiera solicitado la ayuda de Come Colegial porque el nivel de ingresos de su familia no le proveía, necesariamente, para una buena comida todos los días. No obstante, insistió en que, lo que pareció ser un obstáculo en su desarrollo como futuro profesional, fue vencido por la pasión que adquirió de su formación en el recinto mayagüezano de la UPR.
“La experiencia educativa es lo importante. Lo secundario, qué estás estudiando y hacia dónde quieres ir. Yo no sería un buen artista, un buen escritor, ni un orador motivacional si no hubiese venido al Colegio de Mayagüez ni hubiese tenido la experiencia científica de estudiar Ingeniería Química. Cuando organizo un libro o un espectáculo, la estructura mental que dan las ciencias, se pone en funcionamiento”, afirmó.
Precisamente, su paso por el Recinto, formará parte de su próxima publicación autobiográfica que recogerá distintas instancias de su vida.
“Siempre que llego al Colegio pasa algo muy particular. Es como entrar de nuevo a tu casa y obviamente, el Colegio de Mayagüez ocupa una parte sumamente importante en esas experiencias de vida. Yo no sería quién soy, si no hubiese estudiado aquí y no hubiese tenido las experiencias que aquí tuve, así que venir a Mayagüez me produce mucha emoción”, precisó.
Junto al conocimiento, el humortivador enfatizó en la importancia del uso inteligente de los pensamientos y emociones, lo que se conoce como inteligencia emocional, que unida a la lectura, “hará de ti una persona diferente”.
De acuerdo con Silverio, existen cinco factores que inciden en el ser humano: el individuo como buen jugador de equipo, la empatía, la automotivación, la capacidad de escoger ser feliz, y la autoconciencia.
“Como país, no hemos jugado en equipo. La alternancia política nos ha traído hasta donde nos encontramos. Por eso la empatía es tan necesaria. Come Colegial es un programa de empatía, de solidarizarnos con aquel que es distinto a mí por distintas circunstancias. Todos somos parte de un mismo cuerpo y el que no funciona para una de esas partes, no lo hace para el todo. Esa desigualdad provoca hambre, crimen, y origina todos los problemas sociales”, describió.
De la misma manera, recalcó en la importancia de que uno se motive a sí mismo, vinculados al positivismo, el énfasis en ser exitosos y estar conscientes de las distintas personalidades de quienes nos rodean.
“La conversación negativa se convierte en un tornado y resulta en emociones, acciones y resultados negativos. Ustedes tienen que enfocarse en ser felices, escoger serlo, porque el ser humano debe observarse objetivamente para descubrir cómo funciona y qué le da alegría. Deben considerar que el estilo de su personalidad, determinará su éxito en la vida. Entonces, uno puede cambiar y mejorar”, subrayó.
La charla se transmitió en directo a través de Radio Colegial y se acreditaron horas del Centro de Enriquecimiento Profesional (CEP). La actividad contó con el auspicio del Capítulo Delta de la Sororidad de Educadoras ADK, Friends’ Café, y la Oficina de la Rectora del RUM, profesora Wilma Santiago Gabrielini.
Silverio es escritor, músico, motivador, compositor y presentador de radio y televisión. En el Colegio completó su bachillerato en ingeniería química el 30 de mayo de 1970. Además de dedicarse a la fase literaria con libros que van desde Humortivación, Un espejo en la selva (producto de su maestría en creación literaria), hasta La vitrina rota, este ingeniero químico también es columnista de El Nuevo Día.
Come Colegial es una organización de 60 estudiantes voluntarios, establecida desde el 2014, quienes, entre sus responsabilidades académicas, canalizan la asistencia de alimentos para un sector de la población estudiantil del RUM.
Video reportajes disponibles en:
Silverio Pérez visita el RUM invitado por Come Colegial
