El reloj marcaba las 10:16 de la mañana del jueves, 16 de octubre. Entre clases y labores administrativas, el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) se preparó para participar del simulacro de terremotos El Gran Shake Out de Puerto Rico.
La Red Sísmica de Puerto Rico (RSPR), adscrita al Departamento de Geología del RUM, se encargó de coordinar el evento en el que, se registraron 590 mil personas, siendo la región de San Juan la que contó con mayor cantidad de participantes.
El ejercicio tuvo como propósito en el Recinto que se revisaran y actualizaran los planes de emergencia, además, concienciar a los colegiales y al personal que aquí labora, que, ante una eventualidad sísmica, deben: agacharse, cubrirse y sujetarse.
De esta manera, minutos antes de culminar sus clases o de salir a despejarse durante la hora universal, los alumnos que esperaban por ser atendidos en el Departamento de Servicios Médicos experimentaron de primera mano qué hacer ante un temblor.
“Nosotros quisimos compartir tanto con los empleados, como con los estudiantes, los tres pasos a realizarse al momento de que haya un terremoto en Puerto Rico”, expresó Rosie Torres de Calderón, directora de Servicios Médicos.
Según informó la funcionaria, durante la mañana utilizaron el sistema de altavoz de la instalación médica para recordarles a quienes allí estaban, cómo proceder ante una situación similar. Agregó que desalojaron el lugar en menos de un minuto, por lo que calificó la actividad como una exitosa.
“Servicios Médicos tiene normas y estándares de cuidado para cualquier suceso de esta naturaleza, tanto dentro del edificio, como afuera. Si se tratara de alguna emergencia adentro, seguiríamos las recomendaciones de la RSPR, y si tuviésemos que desalojar, contamos con un plan para hacerlo”, describió Torres de Calderón.
Del mismo modo, aseguró que la dependencia universitaria está lista para atender a posibles víctimas del seísmo que pueda suscitarse, tanto en el Colegio como en sus alrededores.
La participación del Departamento es uno de los requisitos para mantener la licencia que les permite operar como Centro de Diagnóstico y Tratamiento, el único en una institución universitaria en Puerto Rico. Por esto, durante el año también se involucran en el simulacro de tsunami que se realiza durante el mes de marzo, conocido como el Caribe Wave/LANTEX.
Por su parte, Glorymar Gómez Pérez, coordinadora del Programa Educativo de la RSPR, se mostró muy satisfecha con los resultados, sobre todo, porque les permitió acoger su preocupación acerca de la protección que requieren, entre otros, los encamados.
“Desde nuestra página del Shake Out promovimos varias alternativas para quienes padecen alguna condición y no pueden agacharse, cubrirse ni sujetarse. Para nosotros fue importante considerar qué pueden hacer los que tienen necesidades funcionales, tanto de movilidad, como de visión o audición. Entiendo que ese es uno de los mayores desafíos que hemos experimentado”, destacó Gómez Pérez.
Asimismo, Gisela Báez Sánchez, coordinadora del área de análisis de la Red.reveló que contemplaron las dificultades de comunicación que se suscitaron anteriormente para mantener enterado al público desde la RSPR.
“En el terremoto que ocurrió el 13 de enero de este año, las páginas de Internet colapsaron, pero con la ayuda del personal del Centro de Cómputos del RUM, la Oficina de Gerencia y Presupuesto del Gobierno de Puerto Rico, la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones y la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias, se han incluido muchos más servidores para que se puedan conectar desde distintos puntos de la Isla”, señaló.
Báez Sánchez enfatizó que se debe tener presente que durante un sismo de magnitud igual a 7.2, como el de Haití, o de 7.3, como el de 1918 en la Isla, seguramente las comunicaciones colapsarían por la falta de energía eléctrica. Ante ese escenario, el mensaje se propagaría mediante radio a través de aquellas emisoras que puedan mantenerse al aire al momento de que ocurra la sacudida, así como por mensaje de texto.
“Ahora sí, les indicamos que estamos haciendo todo lo posible. Hoy probamos nuestro sistema de comunicaciones y con menos de un minuto logramos comunicarnos con las agencias principales en Puerto Rico y emitimos el aviso correspondiente”, explicó.
De hecho, la ocasión sirvió para que los participantes de las charlas preventivas sobre el cáncer de seno, que se encontraban en el Edificio de Enfermería, también se unieran al simulacro.
Además de servir a Puerto Rico, la RSPR se encarga de notificar a la República Dominicana, Islas Vírgenes Británicas e Islas Vírgenes Estadounidenses. Durante esta prueba lograron difundir su mensaje en menos de cinco minutos, lo que esperan emular ante una circunstancia real.
Esta es la tercera ocasión que se realiza El Gran Shake Out de Puerto Rico. Esta prueba comenzó en el 2008 en el sur de California, región en la que se encuentra la falla de San Andrés. Para crear conciencia entre sus habitantes, establecieron esta práctica cada tercer jueves de octubre para reforzar los tres pasos de protección sugeridos por los expertos. A lo largo de los años, se han añadido otras partes de Estados Unidos, así como en Asia y Europa.
En el caso de Puerto Rico, este fue el primer país hispano en participar en el 2012. En aquel momento tuvieron una representación de 750 mil personas que se inscribieron en el primer Shake Out.
Junto a la Red Sísmica, también colaboraron la división del Caribe de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) y la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias de Puerto Rico.