Pioneros en la computación

El Departamento de Ciencias e Ingeniería de la Computación del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) graduó a sus dos primeros estudiantes, Stephan B. Elías Remy y José G. García Negrón, desde que se fundó la entidad académica en el 2015. 

 

Los colegiales desfilaron en la centésima quinta colación de grados de la institución, el viernes, 22 de junio, convirtiéndose así en los pioneros de su clase en obtener el bachillerato en esa especialidad.

 

“Estamos bien satisfechos de hacer historia este año, en el que hemos logrado muchas primeras instancias como nuestro cuadro de honor y, ahora, nuestros egresados. Nos sentimos contentos de poder comenzar a cosechar frutos de todo el esfuerzo de muchos años”, reiteró el doctor Bienvenido Vélez Rivera, director del Departamento, que también ofrece un bachillerato en Ingeniería de Software y un doctorado en Ciencia e Ingeniería de la Información en la Computación.

 

Tanto Stephan como José, que culminaron los requisitos del programa subgraduado de Ciencias e Ingeniería de la Computación, expresaron su gran satisfacción por escribir una página en la historia de su alma mater, a la que están muy agradecidos por la educación recibida que ahora les da un pase de entrada al mundo laboral y profesional.

 

“Me siento bastante emocionado de ser uno de los primeros. Originalmente, entré a Ingeniería Eléctrica con planes de moverme a Ingeniería de la Computación, pero eventualmente abrieron el programa nuevo y decidí cambiarme. Las clases eran más especializadas en mi interés, que es la programación, y la experiencia fue muy divertida”, aseguró Stephan.

 

El sanjuanero de 24 años, cuyas áreas de interés incluyen todo lo que tenga que ver con programación Front End, como aplicaciones móviles y websites, se apresta a trabajar en una compañía startup en Puerto Rico y a “seguir adelante”.

 

En el caso de José, aunque fue admitido en un principio al RUM por Ingeniería de Computadoras, el recién creado Departamento, le abrió las puertas de lo que sería más cónsono con sus intereses. 

 

“La experiencia fue grandiosa, muy educativa, pero, más que todo, interesante. Las clases de técnicas que son electivas fueron mis favoritas, dirigidas básicamente a lo que me gusta. Por ejemplo, tomé clases en términos de Big Data, que es trabajar con mucha información, aplicaciones web, computación de alto rendimiento y otras más”, explicó el carolinense de 23 años.

 

El verano pasado, José trabajó en un internado con la compañía Bloomberg, que ahora lo reclutará en un empleo a tiempo completo a partir del próximo mes de agosto, en la ciudad de Nueva York, oportunidad que lo llena de emoción. 

 

De acuerdo con el director del Departamento, este año recibieron a su tercera clase admitida y la demanda continúa, ya que muchos prospectos quieren estudiar computación especializada como la que ofrecen en su currículo, que es el único en Puerto Rico con la modalidad de Ingeniería de Software.

 

“Nuestro programa, dentro de la Facultad de Ingeniería, es de cinco años e incluye todos los cursos fundamentales requeridos para cualquier ingeniero. Los alumnos se especializan en diversas áreas como: la seguridad, bases de datos, aplicaciones web, inteligencia artificial, aprendizaje por computadoras y bioinformática, entre otros. Ofrecemos cursos avanzados en todas y pueden escoger entre esas o preparar su propio currículo para especializarse en lo que más les interese y apasione. Tenemos planes de seguir expandiendo esas disciplinas, según los desarrollos tecnológicos evolucionen y los recursos estén disponibles”, abundó Vélez Rivera.

 

Actualmente, el Departamento cuenta con 270 estudiantes, a quienes se sumarán otros 100 integrantes en agosto con el nuevo año, y con la meta de que asciendan eventualmente a los 500. 

 

“Hemos crecido exponencialmente. Cada semestre hay más solicitudes de nuevo ingreso y muchas de traslados internos y externos. Cada día se añaden más jóvenes que han demostrado interés en estos programas. Pienso que las áreas que nosotros ofrecemos se han convertido en un complemento porque la computación tiene muchas ramificaciones, pero en cuanto a la programación, vino a suplir esa necesidad en lo que es programar, crear aplicaciones, hacer software, trabajar con la seguridad de las redes, entre otras”, aseguró, por su parte, Celinés Alfaro Almeyda, consejera académica del joven departamento, conocido también como el CIC.

 

Stephan y José desfilaron en la sesión de la mañana de la graduación, junto a la clase del Colegio de Ingeniería.