Son tres mujeres jóvenes, brillantes, talentosas y luchadoras, las que representan la más alta distinción de la centésima tercera colación de grados del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM). Desde sus campos de la psicología, la administración de empresas y la ingeniería aspiran a dejar una huella y a integrar la fuerza femenina que echa hacia delante el país.
Xiomara Michelle Cruz Pabón, Alexandra Nicole Méndez Lamboy y Carla Pamela Puig Mojica recibieron hoy el Gran premio Luis Stefani Raffucci, por haber completado su grado de bachiller con un índice de 4.00 puntos, en una histórica ceremonia que se celebró por primera vez en el mes de enero.
Aunque provienen de disciplinas y facultades diversas, estas tres colegiales tienen en común una gran determinación por alcanzar una meta que ahora las convierte en líderes de su generación. Llegaron con un potencial, pero fue su carrera en el recinto mayagüezano de la Universidad de Puerto Rico, lo que las transformó, maduró y proveyó las herramientas necesarias para enfrentar su vida profesional, según compartieron con Prensa RUM.
Xiomara Michelle Cruz Pabón
Premio Luis Stefani Raffucci
Premio Estudiante de mayor índice académico de la Facultad de Artes y Ciencias
Premio Mejor estudiante del Departamento de Psicología
Con solo dos décadas de vida y una inmensa aspiración de servir a su país, esta caborrojeña culminó su bachillerato en Psicología, un área que con el tiempo se ha convertido en su gran pasión. Resume su corta, pero intensa estancia en el Recinto, de tres años y medio, como toda una vivencia de aprendizaje académica y personal, en la que se enriqueció con compañeros y profesores excepcionales.
“Como ser humano maduré, crecí en autoconocimiento, aprendí perseverancia y resiliencia. Como profesional, adquirí no tan solo conocimiento teórico, sino también práctico. Pude desarrollar liderazgo, más concienciación sobre la salud mental, pensamiento crítico, destrezas de investigación y de comunicación, y más sensibilidad hacia los demás”, reiteró Xiomara, quien realizó diversas investigaciones y estuvo activa en organizaciones estudiantiles.
Gracias a ese bagaje, se visualiza como una líder con mucho entusiasmo de aportar en el campo de la salud mental y contribuir a desarrollar un mejor país. De hecho, Xiomara recibió el pasado semestre el premio de Estudiante Subgraduada Destacada, que otorga la Asociación de Psicología de Puerto Rico (APPR), en su convención anual.
Su próximo paso académico será en la Universidad Carlos Albizu, donde espera completar una maestría en Consejería Psicológica. A largo plazo, su plan es ejercer como psicóloga, a la par de ser pastora y conjugar así otra de sus vocaciones orientadas al bienestar social.
“Me siento más que bendecida, muy honrada y agradecida. La clave para lograrlo fue un conjunto de perseverancia, dedicación, automotivación, visualizar los estudios como una bendición y no una carga, y dar lo mejor de mí en todo”, manifestó sobre el premio Stefani Raffucci.
Alexandra Nicole Méndez Lamboy
Premio Luis Stefani Raffucci
Premio Estudiante de mayor índice académico de la Facultad de Administración de Empresas
Premio Mejor estudiante de Contabilidad y Mejor estudiante de Sistemas Computadorizados de Información
Un reto diario. Así define Alexandra a su querida alma mater, donde obtuvo un bachillerato con doble concentración en Contabilidad y Sistemas de Información. En su ruta, aprendió lo académico, pero también se nutrió en el plano personal y social.
“Al encontrarte junto a muchos compañeros igualmente brillantes e inspirados, nace en uno ese deseo insaciable de superarse en todas las facetas de la vida. Gracias a este ambiente, uno busca envolverse más en actividades de ayuda social en las que los conocimientos adquiridos son el pilar para servir. Uno madura y adquiere las herramientas necesarias para ser un mejor ciudadano”, reflexionó la joven de 22 años, quien laboró en el Centro de Asistencia Voluntaria al Contribuyente en Administración de Empresas.
La mayagüezana se reconoce ahora como una mujer preparada con las herramientas necesarias para alcanzar sus metas. Precisamente, desde que terminó sus cursos en verano de 2016, comenzó a trabajar en la oficina de Hato Rey de Pricewaterhouse Coopers una firma multinacional de servicios profesionales que brinda servicios de auditoría, consultoría y contribuciones.
A la par con sus nuevas responsabilidades, este recién egresada colegial estudia para adquirir su licencia como Certified Public Accountant, de la que ya aprobó dos de sus cuatro partes. Le interesa realizar una maestría y, a largo plazo, se visualiza manejando su propia oficina de servicios profesionales.
Del Colegio, extrañará la gran diversidad de pensamientos y opiniones que la ayudaban a ver la vida desde múltiples perspectivas. En cuanto a la más alta distinción recibida, aseguró sentirse muy honrada.
“Es el resultado de muchos sacrificios no solo míos, sino también de mi familia que siempre estuvo allí para alentarme. La clave está en nunca rendirse y en retarse día a día, ya que lo mejor de uno se revela cuando nos sacrificamos y tratamos de realizar cometidos que anteriormente nos parecían imposibles”, puntualizó.
Carla Pamela Puig Mojica
Premio Luis Stefani Raffucci
Premio Estudiante de mayor índice académico de la Facultad de Ingeniería
Premio Esteban Terrats al Mejor estudiante del Departamento de Ingeniería Mecánica
Uno de sus tesoros más preciados es su universalidad; esa capacidad de ser versada en muchas ciencias y adornada de una multitud y variedad de noticias (según lo define la Real Academia Española), virtud que siente que adquirió en su paso por el Recinto. Acaba de completar su grado en Ingeniería Mecánica, pero tiene la dicha de haber aprendido de múltiples disciplinas de las artes y las ciencias, y de haber sacado el mayor provecho a su estancia colegial.
Desde su natal Caguas llegó a la Sultana del Oeste enfocada en sus cursos básicos para llegar pronto a los de concentración, en los que reafirmó su vocación. A la par con lo académico, Carla participó en asociaciones estudiantiles como la Society of Hispanic Professional Engineers, donde aprendió desde muy temprano a buscar oportunidades profesionales con las compañías, y en las que más tarde obtuvo experiencia como General Electric Aviation y General Motors.
Igualmente, pudo integrar cursos de arte y de italiano a su currículo, lo que amplió ese horizonte. Ya para los siguientes semestres, el trabajo requerido en proyectos grupales la dotó de amistades inolvidables. Todo eso lo combinó con su pasatiempo de visitar las maravillosas playas, ríos y tesoros naturales del Oeste y de participar en las actividades de las asociaciones del Colegio, y hasta los pubs del pueblo.
“Estas experiencias me ayudaron a convertirme en lo que es el principio de una persona universal. Sí, me gradué de ingeniería, pero aprendí de arte, un poco de italiano, cine, emprendimiento. También las vivencias me ayudaron a expandir mis conexiones con compañías para estar mejor encaminada luego de la graduación. Además, pude conocer a profesores que dan su máximo por los estudiantes y están dispuestos a ayudar y aconsejar en tu futuro profesional”, relató la joven de 22 años.
Su próximo paso es unirse al programa rotativo de la compañía General Motors, en Michigan, y, a la par con su trabajo, se concentrará en su portfolio de entrada a la escuela graduada de College for Creative Studies para hacer una maestría en Diseño de Transportación.
“Con los conocimientos que adquiera en la escuela graduada, unido a la experiencia profesional, tendré las primeras bases para lograr mi objetivo de crear productos con una estética impecable y una funcionalidad excepcional. Pienso lograr dirigir la división de diseño de una compañía que llene mis expectativas”, agregó, al tiempo que adelantó que se proyecta en un futuro con un doctorado.
Sobre el premio a su promedio perfecto, la novel ingeniera aclaró que no se propuso ese objetivo, sino que fue el producto de entregarse por completo a su carrera académica, pero con un balance en el ámbito personal y social. Profundamente agradecida por el reconocimiento, Carla brindó su propia receta en cuatro pasos:
“Dar lo mejor de uno; enfocarse en los estudios, más que en las salidas; escoger bien a tus amigos y grupos de trabajo; y disfrutar el proceso”.
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Tres féminas colegiales recibieron el Gran premio Luis Stefani
