Belleza exótica que amenaza
Su belleza o características exóticas no la eximen de causar un gran impacto ambiental que repercute en renglones tan relevantes para el país como su agricultura y su economía. De hecho, aunque se les conoce como organismos que no son nativos y que son introducidos a un ecosistema diferente al de su origen, todavía existe bastante falta de información entre la ciudadanía.
Con esa misión se celebró una particular Casa abierta en el vestíbulo del Edificio Jesús T. Piñero del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), como parte de la Semana nacional de concienciación de especies invasoras. Varias agencias y entidades aceptaron la convocatoria del Colegio de Ciencias Agrícolas (CCA) para ofrecer, ya en su sexta edición, charlas y exhibiciones relacionadas.
“Las especies invasoras causan un alto daño a la parte social, ambiental y económica de Puerto Rico. Desde el punto de vista agrícola, en plantas e insectos tenemos grandes pérdidas y problemas. Desde el ecológico, desplazan nuestra flora y fauna nativa creándole dificultades y que se pueda poner en peligro de extinción”, reiteró la profesora Sally González Miranda, catedrática de esa Facultad, organizadora del evento y portavoz del Grupo Antillano de Especies Invasoras (GAEI).
Según agregó la también especialista en forestación urbana y paisajismo del CCA, estos organismos están presentes en Puerto Rico por diferentes vías que incluyen su traslado desde destinos foráneos, a veces a través de frutas, plantas o animales, su distribución ilegal en tiendas especializadas de mascotas domésticas o, incluso, portadas a través de las condiciones climáticas y el ambiente.
“Entre las que te puedo mencionar tenemos el Jacinto de agua, que es una planta acuática que se trajo a Puerto Rico para controlar ciertos problemas en los lagos. Tenemos que tener cuidado con lo que traemos porque si se propaga y se hace muy próspera en el hábitat, pues desplaza a nuestra flora nativa. Otras especies comunes son los caimanes y las boas, que la gente las compra legal o ilegalmente y después las suelta. Cuando eso cae en el ambiente, se reproduce y se va fuera de control. También hay algunos insectos que dependiendo de los ciclos del viento, pueden llegar a nuestra isla. Así que tenemos esas situaciones”, narró la educadora.
González Miranda aclaró que una especie invasora no tiene que ser necesariamente desagradable ni antiestética, al contrario, suelen caracterizarse por su belleza, y parecer inofensivas. Es por eso, que el colectivo GAEI se dedica a llevar el mensaje educativo a las escuelas, universidades y a la comunidad. De hecho, en esta ocasión, se celebraron tres casas abiertas conjuntas en el Recinto de Ponce de la Universidad de Puerto Rico (UPR), en la escuela elemental Nicandro Galateo, de Isabela, y en el RUM, todos con la colaboración del Servicio de Extensión Agrícola (SEA).
Como colaboradores este año, además del SEA y GAEI, también se integraron: los Departamentos de Agricultura de Puerto Rico y de Estados Unidos, el Cooperative Agricultural Pest Survey (CAPS), el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), y su Cuerpo de Vigilantes, y el Programa Sea Grant de la UPR, entre otros.
La agrónoma Shirley Cruz Correa participó en la Casa abierta para dar a conocer su trabajo como parte del esfuerzo colaborativo CAPS entre los departamentos de Agricultura de Puerto Rico y Estados Unidos.
“Nuestra misión es presentar lo que es nuestro programa, que es muy interesante y variado. Nosotros trabajamos con insectos, plagas, malezas acuáticas; también tenemos un proyecto con abejas. Básicamente, todo lo que buscamos son plagas invasivas, de nueva introducción, saber si están presentes, o no y dependiendo si lo están, se trabaja sobre la marcha”, detalló.
De igual forma, la experta destacó que su rol se destina principalmente en escuelas, de nivel elemental y superior, en casas abiertas como la del RUM y en charlas a las que son invitados, esto aparte del servicio que ofrecen a los apicultores y agricultores. Enfermedades que atacan al árbol de aguacate, así como a las abejas puertorriqueñas, son solo ejemplos de las investigaciones que esa entidad conduce.
Por su lado, la especialista del Programa Sea Grant, Jannette Ramos García, promocionó el esfuerzo de esa entidad para fomentar la pesca, comercialización y el consumo de pez león, en el que han sido clave diversas herramientas educativas que incluyen afiches y charlas.
“Nuestra misión es continuar educando a todas las personas sobre la importancia de consumir pez león, no solamente porque es una especie invasora, sino porque, es un pez que come los bebés de otras especies que nos interesan, como por ejemplo, los chillos y los loros que tienen mucha importancia dentro de los arrecifes de coral. Se come los juveniles y a medida que lo haga, nos van a quedar menos a nosotros para nuestro consumo. Todavía permea la noción de que comerlo es peligroso y no lo es. Son solamente tres sets de espinas que son muy fáciles de cortar, donde está el veneno, pero no en su carne. El pez león es delicioso. De hecho, tenemos un libro de recetas para que el público las pueda ver y apreciar platos diferentes”, aseguró.
Una de las mesas informativas más concurridas fue la del Cuerpo de Vigilantes del DRNA, que exhibió, como en años anteriores, especies exóticas como la boa constrictor, el gecko leopardo, el erizo de tierra, el caimán común y el ball phyton.
“Los Vigilantes siempre nos traen unas colaboraciones que llaman mucho la atención, pero es importante que la gente entienda que a veces estos animales que se ven graciosos o que los queremos, nos pueden ocasionar grandes perdidas económicas y de salud. Así que tenemos que tener mucho cuidado con ellas”, advirtió la profesora González Miranda.
Más información sobre las especies invasoras se encuentra en la página del Grupo Antillano de Especies Invasoras.
Video reportajes disponibles en: Celebran la semana de orientación sobre especies invasoras en el RUM SOURCE: http://www.uprm.edu/portada/article.php?id=3894 |